El Ministerio de Educación y Cultura (MEC) informó que se produjo un “inconveniente técnico” en una de las pruebas para que docentes de Primaria y Secundaria pueda obtener el reconocimiento universitario. La información se perdió, tras lo cual se resolvió “acreditar” los exámenes como si estos se hubiesen salvado. Esto derivó en un nuevo cruce del oficialismo con la oposición y los sindicatos.
La cartera que dirige Pablo da Silveira informó en un comunicado publicado el 3 de octubre en la web del MEC que durante el examen DocenteAcreditado 2023, realizado en diciembre pasado, un “inconveniente técnico” impidió que 121 docentes, de 3.699 que se presentaron a rendir, pudieran “avanzar o guardar correctamente” su prueba de corrección escrita, una de las cuatro requeridas a maestros, o de las cinco para docentes de Educación Media.
“Ante la constatación de este desperfecto técnico en el marco de la comunicación de resultados y dentro del plazo estipulado para los reclamos”, tanto el MEC como el Instituto Nacional de Evaluación Educativa (Ineed), que elaboró toda la prueba, se “disculparon” por el incidente y las “posibles repercusiones personales” a los afectados.
“Considerando el impacto técnico que podría tener en los resultados de la prueba y en la certificación como Licenciados en Pedagogía”, la dirección nacional de Educación del MEC, dirigida por el nacionalista Gonzalo Baroni, resolvió “otorgar la calificación de APROBADO en el área de Producción Escrita y organización textual a aquellos postulantes en quienes se constató esta dificultad”, formalizado en la resolución DNE 769/2024.
El comunicado firmado por Baroni y el titular del Ineed, el dirigente del Partido Independiente Javier Lasida, puntualizó que quienes se vieron afectados por el inconveniente técnico y hayan aprobado todas las otras áreas o pruebas requeridas (cuatro o cinco evaluaciones, según cada caso), “se les otorgará la certificación universitaria de su formación docente”.
Fuentes del MEC indicaron a El País que del total de 121 afectados por el “inconveniente técnico”, 34 perdieron algunas de las otras evaluaciones necesarias, por lo que a pesar de esta definición siguen sin aprobar.
Mientras, 87 sí lograron obtener la certificación porque habían salvado las otras pruebas. De esta forma, pasaron de ser 2.233 a 2.320 los docentes que recibieron la certificación universitaria de su título docente por parte del MEC.
Esto resulta cerca del 60% de quienes se presentaron a rendir la primera prueba DocenteAcreditado, que además de críticas, acumula un recurso de inconstitucionalidad presentado por el consejero del Codicen de ANEP Julián Mazzoni, que aún no laudó la Suprema Corte de Justicia.
Baroni, consultado por El País, remarcó que la acreditación fue “solo” en la prueba de producción escrita y organización textual, una de cuatro o cinco. “Se borró esa prueba y como es culpa de la institución, se le aprobó solo esa parte”, remarcó.
Ante la repregunta de por qué se aprobó y no se solicitó que se hiciera de nuevo solo esa parte, el director blanco retrucó: “El error es del que tomó la prueba, no del docente. No podemos castigar al evaluado”. Y puso como ejemplo que si se rinde un examen universitario y “pierden” parte de la prueba, “es injusto que se tenga que volver a hacer” la misma evaluación.
Baroni insistió que por “un error en la plataforma” no quedaron guardadas las 121 pruebas. “Por suerte afectó a solo al 3% de una de las cinco pruebas”, que lo detectaron en el informe técnico final sobre DocenteAcreditado 2023, añadió.
Lo cierto es que el caso ya generó consecuencias a la interna del MEC. La persona encargada del proceso fue “desvinculada inmediatamente”, por la “demora” en la respuesta a las autoridades para tomar una resolución al respecto, agregó el director nacionalista.
"Es una verdadera vergüenza"
Baroni, que está en la mira del sindicato de profesores de Secundaria (Fenapes) y el Pit-Cnt por haber calificado a El País como “terrorismo” el paro “político” nacional en todos los liceos del país el 15 y 16 de octubre contra la llamada Transformación Educativa, volvió a ser criticado por los docentes sindicalizados y la oposición al gobierno.
“Tendremos los primeros 121 Licenciados en Pedagogía del mundo por falla en sistema informático y no por acreditación de saberes. Insólita resolución de la Dirección Nacional de Educación, considerando aprobada una prueba a quienes no pudieron guardar en el sistema su trabajo”, lanzó el diputado frentista Gustavo Olmos en su cuenta de la red social X.
A lo cual, Baroni le retrucó: “Tato, deberías leer que fue la producción escrita, una de las cinco pruebas. Y de los 121 ni siquiera fueron aprobados todos, porque habían fallado en otras pruebas también. A ellos les falló la producción escrita, a vos la comprensión lectora. Saludos”.
El cruce no quedó solo allí. El director blanco también respondió a críticas de Celsa Puente, la exdirectora del otrora Consejo de Educación Secundaria entre 2014 y 2018, cuando fue cesada.
“Es una verdadera vergüenza. Fin del comunicado”, respondió Puente al secretario de Comunicación y propaganda de Fenapes Andrés Bentancor que preguntó en X si “renunciaron en pleno” las autoridades del MEC.
Tras lo cual, Baroni le contestó en la misma línea, también en X: “Celsa, es una vergüenza que apoyes a actores sindicales que te presionaron en tu gestión y vos cediste, perjudicando a miles de familias y docentes en secundaria. Más que vergüenza, es indigno. Fin del comunicado”.
También hubo otras expresiones desde Fenapes. “ESCÁNDALO. ¿Se acuerdan que se hizo una prueba para darle título de licenciados a docentes que ya tenían título docente? Bueno, por un "problema técnico" a muchos no se les guardó la prueba y se les da por aprobado igual. El sumum del mamarracho y bastardeo a la profesión docente”, lanzó en X la dirigente Camila Menchaca.
En esa línea, el secretario general de Fenapes, Emiliano Mandacen, compartió en X la resolución del MEC, que la calificó de "vergonzosa".