INICIATIVA

En el entendido de que hay experiencias en la educación que merecen ser contadas y de que es necesario compartir qué innovaciones se implementan en las aulas públicas y privadas, el Instituto de Educación Santa Elena realizó su “Feria de Buenas Prácticas en la Educación”.

La iniciativa llegó este año a su séptima edición y, como en años anteriores, comenzó con una convocatoria abierta y pública a docentes para mostrar a través de materiales gráficos y su propia presencia, qué prácticas realizan en sus clases.

Las experiencias presentadas se reúnen en un libro que da cuenta del trabajo y procura servir de inspiración a otros profesionales. Cada ejemplar recoge en 500 páginas que relatan hallazgos, inspiraciones didácticas e innovaciones. En seis años más de 3.000 páginas documentan más de 500 experiencias de todo Uruguay.

“El objetivo de la feria es compartir experiencias, conocer qué hacen los docentes ante las dificultades que enfrentan desde el punto de vista didáctico y pedagógico. Es una oportunidad para que los docentes -públicos y privados de nivel inicial a bachillerato- puedan exponer, intercambiar y socializar desde su conocimiento sobre el hacer”, contó Pablo Cayota, director del colegio y directivo de Instituto Nacional de Evaluación Educativa (Ineed).

“Comprobamos que muchas veces las buenas prácticas no se conocían y si bien es cierto que no se imitan, sí inspiran”, remarcó Cayota. “Constatamos que los docentes estaban muy solitarios en su hacer, pero identificamos que había quienes se arriesgaban y hacían nuevas propuestas. Queríamos darle visibilidad a quienes frente a problemas del sistema educativo, los cambios sociales o de época, buscaban nuevos camino, así surgió la feria”, remarcó el director.

“La creatividad se fomenta en red, la feria es una fiesta de la profesión docente donde compartimos hallazgos, creatividades, problemas”, remarcó Cayota y contó que varios expertos acompañaron la feria y dictaron algunas charlas.

El año pasado la Feria sumó a estudiantes y los invitó a participar junto a sus docentes para narrar las experiencias que habían disfrutado y que consideraban podían inspirar a otros.

Este año Santa Elena propuso otra innovación y además de darles la palabra, los consultó en una investigación de corte cuali-cuantitativo para saber cómo aprendían. Bajo el lema “Los niños y jóvenes toman la palabra”, más de 1.000 educandos contestaron sobre qué los ayuda a aprender.

“Nos enfocamos en ellos. El docente aprendiendo de los sujetos que aprenden”, sentenció Cayota. “Ellos nos transmiten qué necesitan, aprenderemos de la mirada de los alumnos sobre las buenas y malas prácticas”, agregó.

La investigación abarcó una población significativa, alumnos y alumnas desde 4to año de primaria hasta los 6tos años de Bachilleratos, de ambas sedes del Santa Elena: Montevideo y Lagomar.

“Es difícil pensar en cambios realmente significativos, si los mismos no involucran a los autores de los procesos de aprendizajes, principalmente a docentes y estudiantes”, remarcó Cayota.

Los resultados de la investigación que fue presentada por Beatriz Macedo, especialista internacional en educación para Unesco, serán tomados como “insumos de calidad” para fomentar procesos de aprendizajes en Santa Elena.

¿Qué cosas del profesor/a te motivan a aprender mejor? “Expliquen más de una vez y de distintas formas”, “Clases dinámicas, otras maneras de enseñar/ trabajo en equipos”, “Clases con buen humor”, “Empatía con la maestra/profesor/a”, “Motive a sus alumnos”, “Que trabajemos de manera interesante/divertida”, “Sentir que nos entienden”.