La capacidad de leer bien de los niños se puede predecir bastante antes de que aprendan a hacerlo. Esto permite la adopción temprana de medidas para corregir eventuales dificultades que se detecten.

Con esa convicción, investigadores de la Facultad de Psicología de la Universidad de la República (UDELAR) y del Centro Interdisciplinario en Cognición para la Enseñanza, en colaboración con el Basque Center on Cognition Brain and Language, desarrollaron una aplicación denominada Lexiland. Contiene tres videojuegos para niños de cuatro y cinco años que se pueden completar en un lapso de entre 15 y 20 minutos. La aplicación permite, según los resultados que los niños obtengan, elaborar un informe confidencial predictivo sobre su capacidad de leer. En el informe, se muestran los resultados del jugador en las tres áreas evaluadas (conciencia fonológica, conocimiento de letras y memoria) y cuál será su “riesgo lector”, o sea, qué posibilidades hay de que encuentre dificultades.

Juan Valle Lisboa, graduado en Bioquímica por la UDELAR, Magíster y Doctor en Biofísica y Neurociencia Computacional, quien codirigió los trabajos previos al diseño de la aplicación y los juegos, explicó a El País que “una versión reducida de Lexiland es capaz de predecir un año antes con mucha precisión y sensibilidad qué niños tendrán dificultades para aprender a leer en sus etapas iniciales, si no se hace nada distinto”. “Esa predicción es solo válida bajo el supuesto que no se haga ningún cambio en la forma que se enseña; no se trata de una forma determinista de clasificar a los niños. La idea es que Lexiland puede dar información a docentes de que algunos niños pueden requerir un enfoque de enseñanza particular”, agregó.

La investigación comenzó en 2015 como parte del proyecto de doctorado de Camila Zugarramurdi, hoy Licenciada en Biología Humana por la UDELAR, Magíster en Neurociencias por el Programa de Desarrollo de las Ciencias Básicas (PEDECIBA), y docente e investigadora de la Facultad de Psicología de la Udelar. La investigadora utilizó la aplicación para evaluar a más de 600 niños de escuelas públicas de Montevideo en una serie de tareas predictoras del desempeño lector. Con el consentimiento de los padres y de los niños, hizo un seguimiento electrofisiológico de la actividad cerebral mediante electroencefalograma de una sub-muestra de algunos de esos niños (40 en total). Este electroencefalograma apunta a estudiar la respuesta cerebral a estímulos auditivos en el entendido de que el procesamiento auditivo es la base del aprendizaje de la lectura.

El niño debe completar los juegos denominados “Unir sonidos”, “Segmentar palabras”, “Letras y Memoria”. En el primero de los juegos los niños escuchan el sonido o el nombre de una letra. Deben tocar en una pantalla la letra que corresponde a ese sonido o nombre entre tres opciones posibles. “Segmentar palabras” consta de dos subjuegos. En el primero, los niños escuchan una palabra separada en sílabas o fonemas y deben unir los sonidos, formar el vocablo y tocar en pantalla la ilustración que corresponde al mismo, entre cuatro alternativas. En el otro subjuego los pequeños escuchan una palabra. Deben separarla en sílabas o fonemas e indicar en la pantalla cuántas sílabas o fonemas tiene, tocando la ilustración correcta en un dado que muestra 2 a 6 elementos. En el juego “Letras y memoria” los pequeños ven en la pantalla ilustraciones de 9 cerditos ordenados en una grilla de 3 X3. Los cerditos se iluminan en una secuencia que va de 2 a 7 elementos y los niños deben repetir la secuencia tocando los dibujos en el orden en que se iluminaron.

Los resultados quedan disponibles para el adulto referente, quien tiene que haber creado el usuario de la aplicación. Ese adulto referente puede ser un maestro, un familiar o un especialista.

En 2024 los investigadores realizaron una muestra para validar aún más la investigación y los datos estarán prontos en 2025. El instrumento fue presentado a la Dirección General de Educación Inicial y Primaria. Puede ser descargado y usado en lexiland.com.uy. “Hay pocos casos de instrumentos como este que permite que en 20 minutos y de forma grupal, se pueda tener una idea muy precisa de qué niños necesitarán apoyo extra”, dijo Zugarramurdi a El País.