El arte desarrolla seres humanos empáticos, críticos y sensibles. La educación artística ayuda en la evolución del ser humano, cambia a los jóvenes, les da confianza y brinda herramientas para enfrentar las diferentes experiencias y salir adelante. Por ese motivo, el Instituto Crandon priorizó en 2009 por tener un bachillerato artístico. Y volvió a optar en 2015 con la creación de Encuentros de Bachilleratos Artísticos, que luego se repitió en 2018 y tuvo el 18 de agosto de 2023 su tercera edición.
Estos encuentros buscan intercambiar saberes, experiencias, conocer qué pasa en Uruguay en el ámbito del arte, vincularse con tallerista de primera línea. Explorar, preguntar, hacer y seguir brindando herramientas para desarrollarse, detalló la profa. Gloria Sánchez, coordinadora de arte del Instituto Crandon.
En esta tercera edición de Encuentros de Bachilleratos Artísticos asistieron 22 instituciones públicas y privadas y más de 300 estudiantes disfrutaron de la propuesta de forma totalmente gratuita. La idea, explicó Sánchez que tiene vasta experiencia en educación artística, sumado a su trayectoria en el Codicen, Secundaria e IPA, es que esta propuesta se transforme en bienal.
Estas jornadas nacen como una “apuesta institucional” que apunta a abrir las puertas del Colegio a la comunidad. En el Instituto Crandon, se piensa constantemente en la actualización de la formación docente, en el apoyo al estudiante y, por ese motivo, se idean y crean propuestas para “que toda la comunidad educativa tenga la posibilidad de participar. De esta forma, “el Colegio se reafirma como un bastión importante a nivel de educación”.
Miss Reid, misionera impulsora de innovaciones educativas en el Instituto Crandon, decía “se aprende a vivir cuando se aprende a dar”, mencionó Sánchez y agregó: “Estamos convencidos de que es importante el compartir, el ayudar a los otros cuando uno tiene algo para dar. Y no solo materialmente, sino también dar afecto, dar acompañamiento. Esto cierra el pensamiento hacia el que dirige la atención nuestro Colegio”.
Evolución de la propuesta
Los encuentros que se desarrollaron en 2015 y 2018 perseguían un formato de talleres, además de una mesa redonda de bienvenida. En estas jornadas se percibía “una energía positiva, contagiosa. Tuvieron gran éxito, todo el mundo se iba feliz”.
En 2023, el Instituto Crandon decidió innovar y agregar una nueva propuesta de valor. Fue así que, además de los enriquecedores talleres, se invitaron a integrantes de Esperando la Carroza y de La Tregua, “dos obras del medio uruguayo, que habían tenido mucho éxito”.
Sánchez contó que los artistas fueron muy generosos y se sumaron rápidamente a la propuesta.
Durante dos horas, agregó, “no voló ni una mosca”. Los actores contaron los procesos creativos, cómo surgen las obras, cuáles son las dificultades, cómo se escribe un personaje y, por otro lado, cómo interpretar una obra literaria y traducirla en el lenguaje de la danza, como fue el caso de La Tregua. “Fue maravilloso”, dijo la profa. Sánchez, y les confirmó que el camino que habían decidido emprender en esta ocasión fue el correcto.
Esta modificación se eligió “como respuesta a una realidad incuestionable”, detalló la coordinadora de arte. “Vivimos a un ritmo acelerado. Consumimos lo que vemos en las pantallas. Ese consumo limitado del arte nos impide llegar a otros lugares, que aunque no lo crean, nos reciben de brazos abiertos. Obras magníficas que no llegamos a ver. Pues aquí estuvieron los artistas, generosos, de dos obras que dan cuenta de un acervo cultural hermoso, trascendente en el tiempo, que vale la pena vivenciar”, explicó.
Previamente, tuvieron una instancia de bienvenida con Octavio Podestá, que ha acompañado los encuentros desde sus inicios, Noelia Campo y Rodrigo Garmendia.
También se desarrollaron encuentros con diferentes artistas como Eugenia Silveira, Paloma González, Emilio Gallardo, Iván Arroqui, Federico Murro, Daniela Passaro, Carmen Pi, Sebastián Porteiro, Fabián Severo, Fernanda Bértola y Nara Infantozzi donde exploraron desde técnicas plásticas, a percusión, danza, cómic, vestuario, entre otros.
Allí tuvieron la oportunidad de hacer arte, pero también de preguntar, de explorar. Una de las interrogantes que se hacen los jóvenes, explicó Sánchez, es si podrán vivir de eso que estudian. Y el poder intercambiar con artistas ayuda mucho con esas interrogantes.
Educación artística
El Instituto Crandon le da una gran relevancia a la formación artística en su currícula, “no solo para los que eligen este bachillerato, sino que muchas de las asignaturas de otos bachilleratos están atravesadas por el arte”.
Para la coordinadora del área, “está comprobado que es un compendio de asignaturas que ayudan mucho en la evolución del ser humano. Que le permiten estudiar desde la experiencia, desarrollarse”.
Y, por este motivo, Gloria Sánchez cree que la experiencia de los bachilleratos artísticos, que son relativamente nuevos, ha sido muy positiva. De hecho, considera que todos los estudiantes de los diversos bachilleratos deberían tener una experiencia artística, ya que “el arte salva, transforma”, agregó.
Arte en la educación
La profa. Gloria Sánchez expresó que el arte y la educación artística “ayudan a producir relaciones con el mundo y la cultura. Que trabajar con arte es poner en marcha un modelo intelectual de la mente, desarrollando el pensamiento deductivo y divergente, alentando diferentes ideas para responder una misma pregunta, y aunque el término creatividad parezca devaluado, es lo que nos salva de no embrutecer”.
Por este motivo, considera que todas las profesiones, deberían tener un tramo de arte en su formación.