EDUCACIÓN
Debido a la radicación de ciudadanos argentinos y la migración de montevideanos hacia el este, Maldonado está ampliando su oferta educativa para satisfacer la creciente demanda.
Las escuelas uruguayas perderán la cuarta parte de su población para 2030. Eso proyecta la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) en raíz de la “significativa” caída de los nacimientos en el país. El impacto ya empezó a sentirse, de hecho en las últimas dos décadas se redujo un 15% la cantidad de niños cursando la enseñanza Primaria. Pero hay un rincón de Uruguay que cabalga a contracorriente y que, a fuerza de la radicación de ciudadanos argentinos y la migración de montevideanos hacia el este, está ampliando su oferta educativa para satisfacer esa creciente demanda: Maldonado.
En lo poco que va de este año, la inspección de Primaria en Maldonado inició el trámite de habilitación de dos nuevos colegios. Según supo El País, otras cuatro instituciones acudieron a las oficinas para consultar sobre la documentación necesaria para el registro, pero luego no oficializaron el proceso de habilitación.
Este escenario contrasta con lo que se observa en la educación privada del país: los colegios perdieron matrícula (en parte por la baja demográfica y en parte por un corrimiento hacia la enseñanza pública) y dos instituciones cerraron previo al inicio del año lectivo: El Clemente y San Cayetano (otro colegios pidió la baja, pero luego fue “rescatado” por una fundación católica y un jardín de Pando quedó en manos de una cooperativa de docentes y ahora lo controla el Misterio de Educación).
Las cifras
Cero colegios de Maldonado pidieron a Primaria la habilitación para funcionar bajo la currícula oficial. Otros cuatro hicieron consultas, aunque no formalizaron el trámite.
12.489 argentinos solicitaron residencia en Uruguay el año pasado. Significaron el 84% del total de los pedidos que recibió la Cancillería en 2021.
Las únicas excepciones (dejando de lado el atípico caso de Maldonado) son la solicitud de habilitación de una institución en Nueva Helvecia, una en Pinamar vinculada a las “nuevas pedagogías”, y el North Schools en Ciudad de la Costa. En cualquiera de los casos deben cumplir determinadas horas de enseñanza en español, en base al programa oficial, para que se dé la habilitación (de lo contrario figurarían como “autorizados” y los estudiantes tendrían que rendir prueba de egreso).
El País informó que el año pasado, pese al cierre parcial de fronteras producto de la emergencia sanitaria, se batió el récord de solicitudes de residencia. Eso obedece a que 12.489 argentinos pidieron la radicación en Uruguay (representan un 84% del total de residencias del año).
Según la información inmobiliaria y que recoge el propio sistema educativo, muchos de los argentinos que tienen hijos en edad escolar se radicaron en la costa sur de Montevideo y en Maldonado. En su mayoría pertenecen a niveles socioeconómicos altos y prefieren la oferta de enseñanza privada. Eso explicaría el movimiento generado en el este.
En este sentido, Primaria no observó hasta el momento un incremento significativo de su matrícula en las escuelas públicas de Maldonado.
El único rincón del país en donde se viene registrando un incremento considerable, al punto que hay estudiantes que tienen que trasladarse varios kilómetros, es en el tramo que une al peaje de Pando con Salinas (con la ruta Interbalnearia como columna vertebral).
Ante estos cambios migratorios y el flujo entre privados y públicos, Primaria apuesta a universalizar el sistema informático GURI, con la intención de que la Administración cuente con toda la estadística de la enseñanza en tiempo real.
Los colegios ya reportan cada año la cantidad de repetidores y su matrícula, aunque tienen tiempo de hacerlo por normativa hasta un mes después de haberse dado el inicio de los cursos.
Nacimientos cayeron un 3,5% en 2021
En Uruguay nacen cada vez menos niños. Según las cifras oficiales que presentó el viernes el Hospital de la Mujer del Pereira Rossell, el año pasado se registraron en todo el país (y en todos los prestadores de salud) 34.597 nacidos vivos (1.269 niños menos o, lo que es lo mismo, una baja del 3,5%).
Si bien la caída de la natalidad es un fenómeno de las sociedades contemporáneas, según los demógrafos, a partir de 2016 Uruguay ingresó “en una nueva fase de caída pronunciada” que todavía continúa. Desde aquel año se reportaron unos 14.000 nacimientos menos.
El demógrafo y director del área de Investigación de la ANEP, Andrés Peri, explicó que esa “caída” estuvo muy influenciada por la baja de los embarazos en adolescentes. Esos embarazos se concentraban mayormente en los contextos más vulnerables. Por eso, estima el investigador, “es probable que la mayor caída futura de la población en edad escolar se concentre en los contextos más desfavorecidos”.
En el Pereira Rossell, que atiende a una de las poblaciones de menores recursos, la baja de los nacimientos el año pasado fue del 2%.