"No lo veo apocalíptico para nada". Así resumió la directora de Secundaria, Jenifer Cherro, su sensación luego de conocer los datos de egreso liceal en 2023 que marcaron una baja de 4,6 puntos porcentuales respecto al año anterior. El Monitor Liceal presentado ayer reveló que el porcentaje de alumnos que culminaron sus estudios el año pasado fue 56,4%, por debajo de 61%, cifra récord, registrado en 2022.
El egreso de Educación Media Superior (EMS) de Secundaria de 2023 supuso, además, la cifra más baja desde 2019, cuando el porcentaje llegó a 50,4%. El indicador pasó a 57% en 2020, subió a 58,7% en 2021 y dio un salto a 61% en 2022.
En estos años de pandemia la administración resolvió una flexibilización para el pasaje de grado. La promoción dejó de exigir cuatro materias sino que se redujo a tres, y la nota para exoneración de materias específicas pasó de un mínimo de siete en quinto y de ocho en las de sexto, a la nota seis.
No obstante, el año pasado se retomó el régimen de evaluación y pasaje de grado prepandemia, establecido en la Circular 29-57, del plan Reformulación 2006. Tomando esto en cuenta, en vez de hablar de una baja con respecto a 2022, se planteó por parte de las autoridades una suba de seis puntos porcentuales comparando los datos de 2023 con 2019.
Por otra parte, considerando la promoción, en los tres grados se registró una baja del porcentaje frente a 2022, pero se ubicó por encima de 2019. En cuarto año de liceo, en 2023 llegó a 70,7%, lo que supone cuatro puntos porcentuales menos que en 2022 (74,2%).
En el segundo año de EMS también descendió, pasando de 81,6% en 2022 a 78,5% el año pasado, cuando en 2019 fue 76,1%. Mientras que en el último año de bachillerato el porcentaje de promoción en ese grado llegaba a 85,6%, descendió 80,2% el año pasado, cuando en el año prepandemia fue 78,4%.
"Tenemos que compararnos con cuando aplicábamos la reglamentación de la Circular 29-57, en el 2019”, insistió Cherro, quien marcó que hubo una “suba de seis puntos porcentuales netos", en relación a la última cifra de egreso (56,4%) con la del año prepandemia (50,4%).
Cabe puntualizar que en otros informes del monitor, en años de pandemia, no se realizó la comparación hecha ahora en este informe, ni tampoco se aclaró como ahora en los gráficos la flexibilización en el pasaje de grado. De hecho, las autoridades educativas destacaron un salto en el egreso respecto a administraciones previas.
Consultada sobre si esperaba la baja de casi cinco puntos porcentuales entre 2022 y 2023, más allá del cambio de exigencia tras la flexibilización, Cherro dijo que "muchas veces en lo pedagógico, los resultados no se ven enseguida" y reiteró la suba frente a los datos de 2019.
A diferencia de la etapa prepandemia, los alumnos tienen otro período de examen, hasta abril del año próximo. Cherro sostuvo que en los casos en que les restan tres materias pendientes, los estudiantes prefieren recursar antes que dar el examen. “Tenemos que trabajar y mucho”, para lograr que estos “asistan más y se presenten más en los exámenes”, indicó la directora.
El monitor también mostró una marcada diferencia, de 30 puntos porcentuales, entre el sistema público y el privado. Mientras el egreso en los liceos oficiales (públicos) fue de 56,4%, en los liceos habilitados (privados) fue de 86,7%, con una suba, incluso, frente a 2022 (85,7%).
Cherro, al respecto, descartó que esta diferencia se dé por una diferencia en la calidad de los contenidos. "No niego las diferencias de rendimientos. Si a mí me promueven 56,4% y en el privado 86,7%, son datos y los hechos no se discuten. Pero no es porque Secundaria no brinde una educación de calidad. Creo que hay otras coyunturas que pueden estar incidiendo, que llegado el momento pesan sobre la decisión de promoción o no”, valoró.
También destacó el porcentaje de egreso de los liceos públicos y privados, que sumó 61,9% en 2023, frente a 65,4% de 2022. Cherro calculó la diferencia del porcentaje de egreso de liceos públicos de 2019 (50,4%) con el dato de ambos sistemas y concluyó que "sube 11,5% respecto a 2019", según sostuvo.
Al ser consultada sobre si se encuentra conforme con los resultados respondió: "Uno siempre quiere más. Pero estoy conforme porque trabajé sostenidamente. Se han hecho tantas cosas buenas en el período de pandemia, que se sostuvo el sistema educativo, y después se trabajó para lograr una transformación educativa en la educación media. Hemos pasado de clase y con nota".
“Desafíos”
Por su parte, la presidenta de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), Virginia Cáceres, destacó en rueda de prensa una suba en la promoción de bachillerato si se “compara con 2019”, considerando los cambios de nota para exonerar, “porque en pandemia hubo una flexibilización en ese sentido”.
En línea con Cherro, Cáceres afirmó que el nivel de egreso de 2023 fue “bueno”, e incluye “números importantes”. En ese sentido, valoró que 80,2% de los estudiantes terminaron sexto año de liceo pero no lograron egresar ya que deben hasta tres materias pendientes. Mientras que 19,8% acumularon más de tres asignaturas para completar la educación obligatoria.
“Eso es un número que nos desafía muchísimo. Estamos seguros que a partir del próximo año, con la implementación en el segundo y tercer año de bachillerato, de la Transformación Educativa, junto con toda la batería de planes de acompañamiento y tutorías, vamos a lograr que se transforme en un egreso”, aseguró la abogada que tomó las riendas de ANEP en octubre, tras la renuncia de Robert Silva.
A partir de los datos del monitor, que adelantó El País ayer, resumió Cáceres, surgen “muchos desafíos para seguir avanzando”, que además “sirven para ratificar algunas medidas que se han tomado".
“Con la Transformación Educativa, en la Educación Básica Integrada (EBI), no solamente hemos aumentado el nivel de promoción, sino que además hay un dato que para mí es el más importante, que en el nivel de desvinculación de los estudiantes en los últimos tres niveles del EBI pasamos a los niveles más bajos de la serie", resaltó Cáceres.
El Monitor Liceal mostró que la promoción en Educación Media Básica (EMB), de primero, segundo y tercero de liceo, subió el año pasado y llegó a un nuevo máximo (89,8%), lo que supone 2,8 puntos porcentuales más que en 2022, y 9,1 frente a 2019.
En 2020, la promoción en EMB podía ser con hasta 6 asignaturas pendientes. En 2021 y 2022 fue con hasta 4 materias y en 2023 se volvió al régimen de hasta tres asignaturas, que regía en 2019 y años anteriores. En tanto, en séptimo se puede promover con más pendientes.
La EMB quedó comprendida dentro de la reforma, siendo el último tramo del EBI, eje de la llamada Transformación Educativa, que va desde Inicial a tercer año de liceo o UTU. Lo que antes era primero, segundo y tercero de liceo o UTU, pasó a denominarse séptimo, octavo y noveno. Al visualizar los datos de Secundaria, el porcentaje de estudiantes que acreditaron séptimo, octavo y noveno grado, fue de 89,6%, 90% y 87,6% respectivamente.
Sobre el otro punto que destacó Cáceres, la desvinculación interanual, se registró un descenso en todos los grados respecto a años de pandemia y anteriores. En los adolescentes de EMB, la desvinculación bajó a 3,6%, en aquellos de bachillerato fue 10,6%, y a nivel país llegó a 6,2%.
“Es el número más bajo de cantidad de chiquilines que han abandonado el sistema educativo. Nos alienta a seguir adelante en la búsqueda de mejorar la educación pública y que nos ratifica que el camino que hemos emprendido es el correcto”, señaló la titular de ANEP.
Baja en la matrícula
La matrícula total de Secundaria volvió a descender el año pasado y llegó a 259.785, que implica 2.580 menos que en 2022. Esta cifra, como en otros niveles de la educación, ha descendido de manera ininterrumpida desde hace una década.
En los liceos públicos, la cifra de alumnos el año pasado fue de 217.182, lo que implica 3.948 menos que en 2022 (221.130), que si se proyecta en años anteriores, por ejemplo, resulta 10.000 menos que en 2018 (228.236). La matrícula de estudiantes es mayor en EMS (111.834) que en EMB (105.348), desde 2019 cuando se revirtió la tendencia histórica.
No obstante, la situación en los liceos privados es opuesta. La matrícula llegó en 2023 a 42.603, un incremento frente al valor de 2022 (39.901). La última cifra, además, es la más importante en estas instituciones desde 2016. Mientras casi uno de cada tres (28.9%) estudiantes de Montevideo asiste a estos centros, en el interior cae a 8,7%.