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En medio de un fuerte operativo de seguridad sindical y policial varios centenares de estudiantes de todo el continente coparon ayer el centro de Montevideo, en una marcha en solidaridad con el movimiento estudiantil chileno.

Los estudiantes partieron cerca de las 18.30 desde el Palacio Legislativo, transitaron la avenida Libertador y luego se dirigieron hacia la embajada chilena en la Ciudad Vieja, desde donde enfilaron hacia la Intendencia.

Ayer se inauguró el XVI Congreso Latinoamericano y Caribeño de Estudiantes (CLAE); el tráfico en la ciudad quedó paralizado a la hora pico en varias arterias principales, como Libertador, Uruguay y 18 de Julio.

Sobre las 19.50 la columna estudiantil llegó a Juan Carlos Gómez y 25 de Mayo, a media cuadra de la embajada de Chile. Allí los esperaba un doble vallado policial. No se detuvieron, cantaron algunas consignas y siguieron por Gómez.

Los aparatos de seguridad del Pit-Cnt y de la FEUU trabajaron en conjunto. A lo largo del trayecto dos de sus integrantes se encargaban de ir delante de los manifestantes para cortar el tránsito. Otros, portando un brazalete de cartón con una estrella, recorrían la marcha con handys en las manos, ordenando que nadie se saliera de lugar.

Con un arsenal de cánticos, la delegación de estudiantes chilenos lideró la marcha montevideana, en una réplica a pequeña escala de las manifestaciones en Santiago de Chile en reclamo de un cambio en la educación pública en ese país.

"Vamos compañeros, salimos a la calle nuevamente, la educación chilena no se vende, ¡se defiende!", gritaban los estudiantes mientras avanzaban tras una pancarta que rezaba "Educación gratis para Chile".

La marcha iba dejando detrás pintadas frescas en las paredes con reclamos de "no más represión a estudiantes chilenos", mientras se escuchaban más cánticos importados: "El que no salta es Piñera", o "Educación primero, al hijo del obrero. Educación después, al hijo del burgués", y "Chi, chi, chi, le, le, le, ¡Viva Chile!".

Los chilenos también armaron cantos para la ocasión: "Si solución no hay, nos quedamo` en Uruguay", entonaron.

Detrás de los chilenos marchaba la delegación venezolana, muy reconocible porque todos llevaban una campera roja con franjas en azul y amarillo y la inscripción "Venezuela" y "Unasur". Los varones iban rapados al estilo militar.

"¡Chávez!" gritaba un líder; "¡Chávez!", respondían los demás. "¡Fidel!", arengaba; "¡Fidel!", contestaban. También se acordaron de Estados Unidos. "A la mierda, los yanquis. A la porquería, los yanquis", decían con fervor.

Claudia, una ex estudiante chilena de 31 años, argumentó que en Chile "toda la educación es paga". Dijo que "igual te dan bonos, te dan fiado, pero finalmente pagai hasta que te jubilai, ¿cachai?".

Claudia estudió publicidad, aunque tuvo que dejar. "Me estaba saliendo muy caro", afirmó. "En Chile, el más pobre cagó por ser pobre, y el más rico se dedica a viajar y a consumir, pero para él mismo".

Un joven se acercó interesado en salir en la prensa. "¿Sos periodista? Hacénos una nota a nosotros, somos argentinos, de Río Cuarto, vinimos para la marcha", dijo Gustavo, un estudiante de Ingeniería de 21 años.

Después confesó: "en realidad, todo esto de la marcha no nos interesa. Vinimos porque dijeron que salía un viaje para Uruguay". El viaje de cuatro días le costó solamente US$ 100, aunque dormirá en el gimnasio del Club Platense y venir le llevó 20 horas de ómnibus.

"¡Somos pan y vino! ¡Somos los soldados del pingüino! Perón, Perón, que grande sos!", coreaban otros argentinos. De acuerdo a las banderas enarboladas, el abanico ideológico del CLAE va a desde el peronismo hasta el maoísmo, pasando por el comunismo.

Kirchneristas: "Somos pan y vino, somos los soldados del pingüino", gritaban los peronistas.

La conferencia inaugural del XVI Congreso Latinoamericano y Caribeño de Estudiantes tratará sobre "la crisis del capitalismo y sus alternativas en la coyuntura internacional", y será hoy a las 10 de la mañana en el Palacio Peñarol. Los expositores serán Marcelo Abdala, integrante del secretariado del Pit-Cnt, el ex embajador uruguayo en Cuba, Jorge Mazarovich, el politólogo y sociólogo argentino Atilio Boron y el ecuatoriano Sebastián Ceballos.

Luego, a partir de las 14 horas se realizarán varios talleres simultáneos, en los que participarán ministros y autoridades nacionales. En la Facultad de Humanidades, el ministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker, y la intendenta de Montevideo, Ana Olivera, participarán de un taller sobre "desarrollo social, económico justo y solidario del continente", junto al gobernador de Rio Grande del Sur, Tarso Genro. Por otra parte, el canciller Luis Almagro estará en el taller sobre "los mecanismos de integración regional en América Latina y el Caribe: Alba, Unasur, Mercosur y Celac. La integración sur-sur", en la Facultad de Psicología. También participarán en diferentes talleres el ministro de Salud Pública, Jorge Venegas, el presidente de Ancap, Raúl Sendic, la presidenta de Antel, Carolina Cosse y el senador Daniel Martínez. Estará presente también la presidenta de las Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, y el subsecretario general de la Presidencia de la Nación Argentina, Gustavo López.

A las 18 horas se realizará un acto por los 45 años de la Organización Continental Latinoamericana y Caribeña de Estudiantes (Oclae), y un homenaje a Mario Benedetti, en el que se entregará "la orden José Rafael Varona". Más tarde se realizará un concierto en el que actuarán Don Quicuyo, Larbanois-Carrero, Alejandro Balbis, Arbolito y 4 pesos de propina.

Mañana se realizará la conferencia "Educación pública en el siglo XXI", en la que participará el ministro de Educación y Cultura, Ricardo Ehrlich, y otra conferencia titulada "Soberanía nacional vs. los TLC`s" (Tratados de LIbre Comercio), en la que participará el ministro de Industria, Roberto Kreimerman. Luego se realizará una "Mini Copa América" en el Club Aguada y más tarde la marcha de los mártires.