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SEBASTIÁN AUYANET

El fin de semana largo del 12 de octubre transcurre entre turistas que buscan concretar alquileres para el verano y festejos varios en el interior. Autoridades del turismo local sostienen que los datos actuales permiten anticipar una buena temporada.

Algunos turistas recorren la Costa de Oro, balneario a balneario, para comparar precios y sacar las primeras cuentas. Los más previsores ya lo hicieron y, agenda en mano, recorren casas elegidas previamente en avisos clasificados con la intención de concretar y olvidarse hasta diciembre o enero. Los propietarios recorren inmobiliarias para ver cuánto podrán sacar por su casa durante los meses de verano. Turistas argentinos también aprovechan y comienzan a pensar en opciones. Sin embargo, hace por lo menos dos décadas que el fin de semana que cae más cercano al feriado del 12 de octubre -uno de los últimos de este tipo antes de que se acerquen las vacaciones de verano- ya no se considera como clave, definitorio o premonitorio para lo que será la temporada.

"Lo que sí se puede considerar es que es una especie de termómetro", explica Luis Borsari, presidente de la Cámara Uruguaya de Turismo. Según asegura, las perspectivas para la temporada son "muy buenas".

En sintonía con ese pensamiento respondió también la subsecretaria de Turismo y Deporte, Liliam Kechichian. Aunque recordó que desde el Mintur no se suele hacer mucha proyección -"el turismo es muy sensible a cuestiones que pueden ir contra un buen pronóstico", precisó- todo parece indicar que el verano será auspicioso en cuanto a ingresos.

"Setiembre ya fue un mes atípico en cuanto a reservas y consultas. Algunos operadores nos contaron que se cerraron muchos negocios durante ese mes", afirmó.

Como un nuevo argumento se suman este año las perspectivas de aumento del tráfico aéreo que tocará Montevideo. En el mes de enero, llegarán dos vuelos por día provenientes de México y otras conexiones sudamericanas como la recientemente anunciada nueva línea Montevideo-Lima, de Lan.

"A esto se suma que los vuelos provenientes de España para el mes de diciembre están todos completos; ya no hay más lugar", aseguró Kechichian.

"Uruguay viene de pantalones largos en materia turística. Temporadas malas no hay más. Eso sí, se trabaja siempre para que la presente sea la mejor de todas", señaló Borsari, que además recalcó que la afluencia de turistas brasileños también será clave. Destacó las buenas perspectivas de recibir un mayor número de argentinos de Santa Fe, Entre Ríos y otras provincias, que, en su opinión, volverán en buen número debido a la reapertura del puente internacional.

"Brasil está mucho más caro. Basta con preguntarle a los brasileños que ya no sólo vienen a las costas del país sino a las termas", explicó Borsari, y responde a comentarios publicados en Internet que señalan que para muchos uruguayos sigue siendo más barato veranear en costas de ese país.

"No se puede decir que Brasil está más barato comparando una lanchería con el (restaurante) Bungalow Suizo", añadió.

Movimiento. Obviamente que este fin de semana largo no es sólo una oportunidad para cerrar temas veraniegos. A pesar de que no se anuncia un fin de semana de sol intenso, en la Terminal de Tres Cruces hubo ayer 1.500 servicios (76 más que el viernes 9 de octubre del año pasado), con lo cual se calcula que unas 60.000 personas están viajando, un 10% y 15% más que un fin de semana común, según dijo a El País el jefe de la torre de control, Osvaldo Torres. Corporación Vial estimó en 6% el incremento del tránsito en rutas.

Actividades habrá en casi todos los departamentos. A la fuerte convocatoria de fiestas como la del Dulce de Leche (Young), de la Primavera (Dolores) o el cierre de la Semana de Lavalleja, se le suma el importante movimiento hacia departamentos como Salto.

Allí, la capacidad hotelera disponible en centros termales y otros establecimientos de la ciudad está casi completa.

El director de Turismo de la Intendencia de Salto, Eduardo Torres, informó que entre ocupación y reservas las cifras para este fin de semana rondaban entre el 90% y 95% de las 6.000 camas disponibles en Daymán, Termas del Arapey y la capital.