Podrán ser citadas autoridades del Ministerio del Interior.
Por las noches, presos deambulan por pasillos a oscuras, otros mueven barrotes y salen por las ventanas, algunos escalan techos y se aparecen en lugares inverosímiles pidiendo auxilio a la guardia. Así es el día a día en los módulos 8, 10 y 11 del Comcar.
Estos tres edificios fueron calificados en un expediente judicial como "tierra de nadie" tanto por policías como por reclusos.
Ayer, el fiscal penal Gustavo Zubía solicitó al juez de 15° Turno, Ricardo Míguez, que se abra otro expediente para investigar la situación crítica que hoy viven esos módulos del Comcar.
A la investigación podrán ser citados jerarcas del Ministerio del Interior para que expliquen sobre las causas del actual espiral de violencia que se vive en ese y en otros establecimientos penitenciarios del país.
Miedo.
Desde las ocho de la mañana de ayer, el juez Miguez y el fiscal Zubía investigaron la muerte del recluso Miguel Ángel Rey ocurrida en la madrugada del miércoles 7 durante una reyerta entre dos grupos de encarcelados. Rey fue apuñalado dentro de su celda y su cuerpo rodeado con un colchón de polyfom. Luego los atacantes encendieron fuego al colchón. y el preso murió calcinado en minutos.
El ataque fue una venganza contra Rey, ya que hace cuatro años mató a otros tres internos con el mismo método. Se trata de una modalidad de asesinato muy común en cárceles mexicanas.
Tras una investigación realizada por el Departamento de Investigación y Análisis Penitenciario (DIAP) se identificó a los siete reclusos que participaron en la reyerta.
En la tarde de ayer, el fiscal Zubía solicitó el procesamiento con prisión de un preso por un delito de homicidio. Este preso lideró el ataque contra la celda de Rey porque un familiar suyo había sido ultimado por éste hace cuatro años.
El fiscal también solicitó el procesamiento de otros seis reclusos por incurrir en delitos de homicidio en grado de tentativa. El juez Míguez hizo lugar al pedido del fiscal Zubía y reprocesó a los presos.
Emergencia.
Ayer declararon integrantes del Comando del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), el comisionado parlamentario Juan Miguel Petit, guardias del Comcar y reclusos. Las autoridades carcelarias y Petit coincidieron en que la situación en los módulos 8, 10 y 11 del Comcar es de emergencia, según indicaron a El País fuentes judiciales.
"Estamos ante una situación crítica", sostuvo Petit, quién destacó que las autoridades del Ministerio del Interior estaban tratando de impulsar planes de rehabilitación mediante programas de estudio y trabajo dentro de los penales para palear la situación. Como un ejemplo del espiral de violencia existente en las cárceles, ayer trascendió en el Juzgado de Míguez que otro recluso del Comcar había sido herido.
Guardias y presos declararon en el Juzgado que el nivel de estrés es elevado, ya que el riesgo de vida es algo continuo. En cada módulo conviven 700 presos y son custodiados por cuatro funcionarios. Lo que sí funciona es la zona perimetral de cada módulo que es vigilada por el Ejército, cuyos efectivos tiran a matar si alguien intenta cruzar dicha alambrada.
Espiral de violencia y carencias de todo tipo.
Entre el sábado 3 y ayer viernes, tres personas resultaron muertas en las cárceles, otras tres sufrieron quemaduras graves y dos internos recibieron heridas leves en peleas y un intento de motín. En lo que va del año, 31 internos fueron asesinados y 70 fueron heridos, cifra récord según las autoridades.
En la tarde de ayer, policías penitenciarios señalaron al juez penal Ricardo Míguez que las carencias en el Comcar son edilicias y de recursos humanos.
"Las rejas son de mala calidad. Por ejemplo, las terminaciones de las puertas tienen policarbonato (un plástico duro) y es muy fácil destruirlas", señaló un policía antes de salir de la sede.
Otro guardia relató que los presos tienen en su poder armas de fuego, las que esconden en los patios y en agujeros en las paredes para evitar que sean encontradas en las requisas.
En tanto, los presos señalaron que no habían suficientes cupos de trabajo y estudio en el Comcar.
SITUACIÓN CARCELARIA