Hong Kong - Su fama ha crecido al punto que en medio de las protestas callejeras en Hong Kong algunos chinos se detienen para tomarle fotografías, principalmente las chicas. Pero el actor mexicano Gael García Bernal está en la ciudad no para el estreno de su última cinta o hacer campañas de publicidad.
Al contrario, García Bernal ha venido a ver de cerca lo que califica como la compleja realidad del comercio y a "pedir lo que todo el mundo pide" en las naciones en vías de desarrollo: Un comercio justo.
"Ese punto intermedio entre lo que un productor cosecha y cómo llega a nuestras manos, ese punto intermedio llamado comercio es algo muy complejo. Muy difícil de entender las reglas del juego", dijo a The Associated Press en el centro de convenciones donde se reunirán hasta el 18 de diciembre ministros de las 149 naciones miembros de la Organización Mundial de Comercio (OMC) en su sexta cita global.
Ese punto intermedio, añadió el actor de 27 años, "es un misterio andante y lo que no logro entender... cómo el maíz, estando al alcance de la mano, puede costar tan caro para los consumidores, subirles el precio de la tortilla y demás...(y) los campesinos no están ganando ni un peso".
Para entenderlo "siento que me hace falta estar dentro de las mesas redondas o cuadradas o rectangulares (de las negociaciones)... es muy interesante todo esto porque afecta el día a día, no solo mío... (sino) de todo el mundo", agregó el actor, que vive en la ciudad de México y estudió actuación en Londres.
Su participación en las protestas y peticiones de grupos civiles y agrícolas de países pobres a las naciones industrializadas, durante la reunión de la OMC, llegó de la mano del grupo internacional no gubernamental Oxfam, algunos de cuyos integrantes conoció en Edimburgo, donde se celebró en julio la cumbre del Grupo de los Ocho.
Los activistas de Oxfam le invitaron entonces a participar en actividades durante la reunión de la OMC y Bernal llegó el fin de semana a Hong Kong, donde permanecerá hasta el 16 de diciembre, cuando regrese a México.
Ahora que participa en acciones de Oxfam dijo sentir "que debo ser actor de base con una organización de base en México o en Latinoamérica", aunque aún no decide cuál ni para que tipo de proyectos.
"Entiendo que yo puedo hacer más con una organización de base o trabajar con una organización de base que (con) una organización mundial", indicó Bernal, quien saltó a la fama en el año 2000 con la película "Amores Perros", del director mexicano Alejandro González Iñárritu.
Después llegaron cintas como "El Crimen del Padre Amaro", del 2002, aunque su salto al estrellato, no solo latinoamericano, sino internacional, fue en 2004 con "Diarios de Motocicleta" y "La Mala Educación", de éxito en el festival de Cannes.
El año entrante estrenará otras dos y actualmente se dedica a un proyecto de televisión independiente del cual declina dar detalles.
"Hay que ser actor de base, actuar en el día a día, todo esto reafirma este sentimiento que tengo desde chico o que nací con él, no sé, de que toda acción que hagamos en nuestra vida tiene una complejidad política", dijo.
AP