El subsecretario de Defensa Nacional, Jorge Menéndez, reveló en la Comisión de Hacienda de Diputados que el Gobierno está en conversaciones con Alemania por el águila del Graf Spee.
"No quisiera adelantar en esta instancia cuestiones que pueden llegar a comprometer parte de la negociación y del proceso que en este momento se está realizando, y que pueden significar posiciones u obligaciones que debamos asumir en determinadas circunstancias", indicó Menéndez ante una inquietud planteada por el diputado nacionalista Jorge Gandini, por la situación de la pieza.
"Estamos llevando adelante conversaciones, por ejemplo, con la Embajada de Alemania, desde donde se nos ha hecho determinado tipo de planteos en cuanto a situaciones que no van en la misma línea de lo que consideran el Ministerio ni nuestras asesorías. Pensamos que este es un proceso que nos va a llevar un tiempito más; tenemos alguna idea al respecto, pero necesitamos un poco más de tiempo para poder dilucidarlo", agregó el subsecretario de Defensa.
Gandini planteó el hecho de que la pieza se encuentra guardada en una caja en un depósito del Fusna (Fusileros Navales) y que podría ser una fuente de ingresos para el Estado, tomando en cuenta las cotizaciones que se han manejado públicamente y que en el menor de los casos hablan de un valor cercano a los US$ 8 millones.
"No sé cuál es la negociación ni le voy a pedir detalles, pero tengo entendido que hay un contrato con los particulares. Y esa inversión se basa en un riesgo que asumen, pero que, en la medida en que se encuentran esos objetos, hay un contrato en el cual la inversión se rescata y van al resultado, y ahí hay un contrato firmado", dijo el legislador nacional.
"Si Uruguay hace una negociación con Alemania, que no sé por qué pero es sin precio, Uruguay puede enfrentar luego un juicio por daños y perjuicios en tanto hay quien firmó un contrato con el Estado y a partir de esa firma gastó dinero. Y ese dinero al menos lo va a querer rescatar, y el valor lo va a querer tener de su parte. Es decir, me da la impresión de que el Estado puede donar la parte suya, pero no la que no le pertenece en tanto tiene un contrato. Y si ese contrato no se cumple, se irá a la vía judicial. Eso es lo que me preocupa", alertó Gandini.
"Acá puede haber beneficio para el Estado y, si no, puede haber hasta perjuicio. Hay que tener mucho cuidado", agregó el legislador nacional.
La parte que corresponde a Bado y Etchegaray.
El águila del Graf Spee es del Estado, al igual que el buque y las piezas que se han recuperado de él, como su telémetro. Sin embargo, la venta de los elementos rescatados debe repartirse entre el Estado y los rescatistas, 50% para cada uno.
De la parte privada, el 50% le pertenece al jefe de la operación de rescate, el buzo Héctor Bado, y el restante 50% a los hermanos Alfredo y Felipe Etchegaray (25% a cada uno).
Esta sociedad funcionó muy bien durante largo tiempo, hasta que se rompió. La Justicia hizo lugar hace poco a una medida cautelar solicitada por Bado contra Etchegaray. Este último estaba ofreciendo los derechos de venta del águila, lo cual ya no puede hacer.
Subsecretario de Defensa dijo que Alemania está interesada en mascarón