Cambio de carátula en caso Radiccioni: fue imputado por homicidio muy especialmente agravado

En una audiencia realizada ayer, el empresario Humberto Radiccioni, de 76 años, fue imputado por el delito de homicidio muy especialmente agravado, por haber matado a sus dos socios en setiembre.

El doble homicidio ocurrió el 21 de setiembre en Empalme Olmos, en las inmediaciones de su fábrica “Ticholos del Uruguay”. Allí, primero disparó y luego remató a sus dos socios, según se puede ver en cámaras de videovigilancia. También fueron divulgados audios aportados por el servicio 911 sobre la llamada de una de las víctimas donde alertaba lo que había ocurrido.

Si bien inicialmente se le había imputado el delito de doble homicidio simple, la fiscal Silvia Blanc solicitó el cambio de carátula, pedido al que accedió la jueza Natalia Pereyra. Aunque no existieron nuevos elementos aportados por Fiscalía, se entendió pertinente el cambio en la tipificación del delito.

El otro pedido por parte de Blanc fue cambiar las medidas cautelares actuales -arresto domiciliario con tobillera electrónica y sin posibilidad de salir del país- a prisión preventiva, lo que la jueza rechazó por entender que no se presentaron evidencias de incumplimientos o riesgos hacia la investigación.

El clima fue tenso desde las horas previas, cuando familiares y amigos de los asesinados, Nicolás Bruzzone (42) y Jorge Percovich (30), se manifestaron afuera del juzgado de Pando con una pancarta que llevaba la inscripción “Humberto Radiccioni asesino, tu avaricia destruyó a nuestras familias”. También mostraron otros carteles en los que pedían justicia.

Al momento de la llegada de Radiccioni en un patrullero policial sobre las 12:45 horas, se escucharon insultos y recriminaciones, hasta voló una botella de plástico que impactó contra una pared.

La audiencia programada para 12:30 comenzó finalmente sobre las 13:10, y los familiares la presenciaron a través de un monitor. Con el pasar de los minutos aparecieron las lágrimas y gestos en respuesta de lo que ocurría en la sala, donde Radiccioni se mantuvo cabizbajo desde el primer momento hasta salir de la sala.

Tras más de dos horas de sesión, el empresario se retiró igual de insultado que cuando llegó. Al retirarse, dio declaraciones el abogado y exfiscal de Corte, Jorge Díaz, quien defiende a una de las familias.

El abogado explicó la importancia del cambio de carátula ya que la imputación del nuevo delito significa, entre otras cosas, que se inhabilita la opción de llevar a cabo un juicio abreviado, y también la extensión de la pena, que pasó de tener una mínima de dos años y una máxima de 12, a que la mínima sean 15 años y la máxima 30.

“A nuestro criterio existe riesgo de fuga”, dijo Díaz que además destacó que se trata de una persona que “tiene todos los bienes a nombre de sus hijos”, y que “teniendo en cuenta la pena y que pasaría sus últimos días en la cárcel” consideran que ese peligro está latente.

Consultado sobre el motivo por el cual Radiccioni no fue enviado a prisión, reflexionó que “se está padeciendo un error inicial en la imputación y en la medida cautelar”.

Luego de la audiencia también habló Antonio Bruzzone, padre de Nicolás, quien afirmó sentirse “vulnerado” ya que “no hay garantía de que Radiccioni no actúe” contra ellos.

El padre de la víctima culpó al homicida de haber cometido estos actos con el objetivo de “disolver la sociedad que tenía con sus socios” -ahora muertos- a los que “no podía pagarles su parte de la empresa”.

Además, mencionó a uno de los hijos del empresario -Javier Radiccioni, diputado por el Partido Nacional- diciendo que está dando un desalojo a la sociedad para “quedarse ellos con toda la empresa”.