El 13 de noviembre de 2020, el conductor de un camión, Carlos G. transportaba una retroexcavadora por los accesos en dirección hacia las afueras de Montevideo. Al llegar a la zona de La Teja, el brazo de la retroexcavadora chocó contra un puente peatonal.
Dicho puente cayó sobre la camioneta Renault del pizzero Pedro Recalde, de 52 años, quien se dirigía hacia la zona de El Dorado, Canelones. Recalde falleció. En el siniestro otras cuatro personas resultaron con heridas. Dos de ellas se encontraban encima del puente y otras dos circulaban en un auto Suzuki detrás de la camioneta de Recalde.
El chofer del camión, defendido por el abogado penalista Nicolás Pereyra, llegó a un acuerdo el pasado lunes con la fiscal del caso, Sabrina Flores, de ir a un juicio abreviado.
Según el documento del acuerdo, al que accedió El País, Carlos G. aceptó los hechos tal como fueron imputados por la Fiscalía y se declaró culpable de un homicidio culposo complejo. Tal tipificación refiere a la muerte de una persona por el actuar negligente o imprudente de otra, en este caso el chofer del camión.
El acuerdo alcanzado entre Flores y Carlos G. fue refrendado ayer ante la jueza penal de 42° Turno, Dolores Sánchez. La fiscal Flores y el chofer acordaron también una pena de 24 meses de prisión. Dicha pena se cumplirá en régimen de libertad a prueba, según el fallo de la magistrada.
El chofer, además, deberá cumplir con las siguientes condiciones: fijación de domicilio por el plazo de la condena; sujeción a la vigilancia de la Oficina de Seguimiento de Libertad Asistida (OSLA) del Ministerio del Interior y prohibición de conducir por dos años.
Carlos G. también deberá realizar servicios comunitarios de cuatro horas semanales durante ocho meses, según el plan que le asigne OSLA, sin que afecte su horario laboral. Finalmente, el chofer enfrentará una prisión domiciliaria por el término de 12 meses, la que será controlada por los técnicos de OSLA.