Redacción El País
La Justicia dispuso una condena de 16 años y nueve meses de cárcel para el homicida de Marcelo Demestoy, gerente del supermercado Ta-Ta en Parque Rodó, que fue asesinado el 29 de mayo de 2023.

Según informaron fuentes del caso a El País, la Fiscalía de Homicidios tercer turno, a cargo de Adriana Edelman, pedía al principio 25 años de prisión, pero la defensa 16 años y nueve meses. Después del proceso simplificado de este viernes, y habiendo el imputado admitido el crimen, la Fiscalía dijo que estaba de acuerdo con la solicitud de la defensa. El hombre ya se encontraba en prisión por otras rapiñas previas al homicidio.

Edelman indicó en rueda de prensa que se optó por un proceso simplificado que "reduce la estructura en cuanto a cantidad de pruebas que se manejan". "Esto tiene que ver con las fortalezas y pruebas que tiene la Fiscalía en la carpeta investigativa", añadió. La fiscal sostuvo que en este caso se consideró que correspondía este proceso para "lograr una condena segura".

"Fue un trabajo muy arduo, tuvimos el trabajo de la Policía que nos permitió hacer cotejos de imágenes. Se construyó todo a partir de indicios, porque a primera vista no se sabía quiénes eran las personas", aseveró.

Rafael Silva, abogado de la familia, explicó en rueda de prensa que con la sentencia "se cerraba un capítulo" luego de "prácticamente dos años, que se estuvo a la espera de que llegara a este día".

El abogado sostuvo que había "conformidad" con la sentencia y expresó "agradecimiento por parte de la familia a la fiscal Edelman y a la Policía y funcionarios" que trabajaron en aclarar la investigación.

El crimen aconteció el 29 de mayo de 2023, cuando el ahora condenado y otro joven —que fue encontrado muerto mientras era buscado—, acostumbrados a cometer rapiñas juntos, salieron desde el barrio Cerro en una moto y se dirigieron hacia la zona de Parque Rodó. Detuvieron el vehículo a pocas cuadras del supermercado Ta-Ta ubicado en José Filgueira y Carlos Maggiolo, y llegaron al lugar caminando.

Uno de ellos, el condenado, amenazó con un arma de fuego al guardia de seguridad, exigiéndole que entregue el botón de pánico, mientras que el otro fue a las cajas registradoras para llevarse el dinero, que eran $ 4.402.

Foto: Leonardo Mainé/Archivo El País.

Mientras tanto, el que estaba con el guardia lo llevó hacia el fondo del local, donde se encontró con el gerente, Marcelo Demestoy, y lo obligó a subir unas escaleras hacia la administración, donde creía que estaba la caja fuerte.

En un forcejeo con el guardia, el delincuente le pegó un culatazo en la cabeza. Al mismo tiempo, un disparo salió de la pistola e impactó en la cabeza de Demestoy, lo que terminó con su vida.

Los dos jóvenes huyeron hacia la calle en la que habían dejado la moto, y volvieron a dirigirse hacia el Cerro, pero quedaron registrados en cámaras de seguridad.

Foto: Francisco Flores

Ambos tenían un historial de rapiñas cometidas en distintos locales. Una de ellas el 13 de mayo de ese mismo año, en la que ingresaron a un supermercado ubicado en General Flores y Chubut, donde con el mismo modus operandi exigieron dinero mediante amenazas y golpearon a un empleado y a un cliente. Meses atrás, en febrero, habían rapiñado de la misma forma un almacén en Hermanos Gil y Avenida Agraciada.

Finalmente, la formalización por el homicidio del gerente de Ta-Ta fue el 8 de diciembre de 2023. Los delitos imputados por Fiscalía son homicidio muy especialmente agravado por ser cometido para consumar otro delito, lesiones personales y porte de arma de fuego.

Pocos días después del homicidio de Demestoy, cuando ya se había emitido una orden de captura en su contra, apareció en Lezica el cuerpo del segundo partícipe de la rapiña al supermercado Ta-Ta.

El cadáver fue descubierto el mismo día que atraparon al otro joven. Lo encontraron sobre las malezas próximas a unos cañaverales de la zona, y había recibido un disparo en la cabeza antes de que gran parte de su cuerpo fuera incinerado.

La búsqueda en la zona del Cerro, donde el joven vivía, se había vuelto intensa, por lo que los investigadores presumen que se trató de un asesinato para "sacar a la Policía del lugar".