El ministro de Defensa, Javier García, ordenó este viernes que comience una investigación administrativa a un profesor de Historia del Liceo Militar a quien Romina Celeste Papasso señaló en su denuncia al senador Gustavo Penadés, confirmaron fuentes del Ministerio de Defensa a El País. Según Papasso, él era encargado de contactar a menores para que mantuvieran relaciones sexuales con el senador.
El profesor fue señalado por la primera denunciante de Penadés en varias oportunidades. Luego de declarar ante la fiscal que lleva el caso, Alicia Ghione, la militante nacionalista Romina Celeste Papasso escribió en su cuenta de Twitter: “Si alguien sabe algo de este otro pedófilo que desapareció del mapa que avise. Cerró todas las redes sociales, era el encargado de llevarle a los menores de edad”. En otro momento, aseguró que el docente “filtraba” diferentes perfiles y concretaba los encuentros.
Según reconstruyó El País, luego de que su nombre comenzara a circular, el ministerio y el profesor acordaron una licencia. El hombre se presentó este jueves al Liceo Militar con una nota del abogado. Allí Defensa decidió iniciar una investigación administrativa, informó el periodista Ignacio Álvarez (La Pecera, Azul FM), pero le permitió seguir trabajando ya que aún no se había probado su participación ni tampoco había sido citado por la fiscal.
Romina Celeste fue la primera persona que denunció a Penadés. En un primer momento lo hizo de forma pública, pero luego pidió la asesoría legal del consultorio Jurídico de la Universidad de la República (Udelar) y efectivizó una denuncia penal. Según su relato, Penadés abusó de ella cuando todavía se identificaba como varón y menor de edad. El senador le habría pagado por mantener relaciones sexuales luego de “levantarlo” en el Parque Batlle.
Esa situación se habría reiterado en el tiempo. Tras la denuncia, otras personas manifestaron ser víctimas del legislador. El estudio de la Udelar tiene a su cargo, además de la denuncia de Celeste Papasso, otras tres denuncias (una de un mayor de edad, que habría sido explotado cuando era menor, y otros dos menores de edad, cuyos relatos son “recientes”).
En tanto, el senador pidió licencia en el Senado y espera ser convocado por la fiscal. Según informó La diaria, hay otras dos personas que denunciaron al legislador pero que no son representados por el estudio jurídico de la Udelar.