SENTENCIA
Juan Giménez aseguró que hoy hay “una prueba científica” que dice a quién petenecen “las manchas de sangre que estaban en las pertenencias de Lola”.
“El análisis genético nunca lo vinculó a este señor porque vinculaba a una persona que no sabíamos quién era, que hoy sabemos quién es”, dijo este lunes en rueda de prensa Juan Giménez, el juez que absolvió a Ángel Moreira (alias “Cachila”) por encubrimiento en el homicidio de Lola Chomnalez.
El juez aseguró que hoy hay “una prueba científica” que dice a quién petenecen “las manchas de sangre que estaban en las pertenencias de Lola”. El que depositó el material genético “nunca fue Moreira", dijo y añadió: “Eso lo sabíamos desde un principio”.
Moreira era la única persona procesada por el caso hasta la detención e imputación de Leonardo David Sena, que está ahora en prisión preventiva por el delito de homicidio muy especialmente agravado. El ADN del hombre coincide con el hallado en pertenencias de Lola.
La sentencia absolutoria de Moreira significa “que no se encontraron pruebas al analizar todo el expediente sobre su participación en el delito de encubrimiento, que era con el que la Fiscalía pretendía su condena”, explicó.
Asimismo, puntualizó que la recuperación de libertad del “Cachila” se define como provisional porque “la sentencia no está ejecutoriada”. “La sentencia se notifica a la Fiscalía y a la defensa y existe la posibilidad de que sea recurrida. Si no es recurrida, pasa un plazo determinado y la sentencia queda ejecutoriada”, afirmó