Esta semana la Justicia imputó a dos personas por el homicidio de un adolescente de 13 años y por haber herido a un niño de 11 años. Se trata de dos jóvenes de 20 y 21 años, también fue detenido un menor de edad de 15 años. De su caso se encarga la Justicia de Adolescentes, que dispuso que sea internado en el Inisa. La fiscal adscripta de Homicidios de 1er Turno, Natalia Pereira, dijo en audiencia —a cuyo registro tuvo acceso El País— que el crimen se dio en el contexto de "un enfrentamiento que hay entre bandas" que existe en el barrio, aunque "en este caso, igual, el objetivo eran los menores".
Según reconstruyó El País, los integrantes de las bandas en conflicto son adultos y ahora los investigadores intentan revelar por qué esta vez atentaron contra los niños.
El crimen ocurrió el 3 de febrero a las 10 de la noche en una casa en Plácido Ellauri. Allí estaban una mujer con su hijo de 11 años y su hija de 10, otra madre con sus dos hijos mellizos de 13 años (uno de ellos fue la víctima fatal) y también dos adolescentes, hermanas entre sí, de 15 y 14 años. Los agresores pasaron (eran cuatro en total) por la puerta de la casa en dos motos y comenzaron a disparar contra la vivienda.
A raíz del ataque murió uno de los mellizos de 13 años, fue herido a disparos el niño de 11 y las hermanas adolescentes y la niña de 10 años sufrieron heridas leves.
Según relataron testigos, pasaron conduciendo la moto y disparando al grito de: "¡Somos los Calveira! ¡Somos los Calveira!". El padre de uno de los imputados lleva ese apellido. El País informó días atrás que el adolescente que murió era pariente de la familia Los Bartolo. Esta banda, que siempre se manejó con mayor fuerza en los alrededores de Marconi y Cerrito de la Victoria, llegó a plantar cara al grupo de los Suárez de Cerro Norte, cuando todavía estaba liderado por Luis "Betito" Suárez.
Si bien los Bartolo llegaron a controlar el territorio de forma casi total durante varios años, muchos de sus integrantes cayeron presos, y otros decidieron moverse hacia barrios cercanos
Los testigos identificaron a los imputados como los atacantes. Ambos fueron encarcelados preventivamente por disposición del juez Alejandro Asteggiante, quien a su vez los imputó por un cargo de homicidio muy especialmente agravado por el concurso.
La defensa de un imputado
El abogado de uno de los imputados intentó argumentar ante el juez alguno de los motivos por los que creía que su cliente no debía ir a prisión preventiva. Juan Carlos Fernández Lecchini apuntó que había pruebas que era necesario analizar previo a esa medida y que podían exculpar a su cliente.
En primer lugar, dijo que tenía una coartada. Al momento de los hechos, dijo, el joven estaba en su casa con su novia, una tía, una sobrina y la pareja de ella. Allí, "llegan los supuestos autores, exaltados, diciendo que habían hecho algo", relató el abogado, quien también argumentó que la moto que aparece en las filmaciones es parecida a las de las personas que se presentaron ese día en la casa de su cliente.
Explicó que, por ejemplo, la moto de su defendido tiene un tipo de luces que la utilizada para perpetrar el crimen no tiene.
A estos argumentos, la nueva titular de la sede de Homicidios, Sabrina Flores, dijo que tienen estudiada ampliamente la composición de los clanes familiares que operan en el barrio y que las personas señaladas por el imputado como culpables no aparecen asociadas a "los Calveira". Resaltó, además, que todos los testigos presentes señalan a los que pretende inculpar la Fiscalía.