La investigación contra el expresidente de la Federación de Funcionarios de OSE (Ffose), Federico Kreimerman, fue extendida por 180 días debido a que Fiscalía continúa analizando información sobre el episodio ocurrido el 13 de junio del año pasado. Existió una ampliación de denuncia por parte de OSE, y en las próximas semanas habrán nuevas citaciones.

La fiscal de Flagrancia de 16° Turno, Bettina Ramos, solicitó la prórroga de la investigación contra Kreimerman en una audiencia realizada en la mañana de este jueves a la que asistió El País.

Kreimerman se encuentra imputado por el delito de atentado agravado, por haber encendido una bomba de humo dentro de un edificio de la empresa estatal, en el marco de una manifestación contra el proyecto Neptuno.

Los argumentos de la fiscal para solicitar la prórroga, se basaron en que aún resta analizar información que puede ser clave. El resultado del sumario realizado por OSE fue presentado en los últimos días al equipo fiscal, y consiste en más de 300 páginas y varios gigabytes de material, por lo que aún no ha sido procesado.

A su vez, información divulgada en el programa de televisión Santo y Seña (Canal 4), con imágenes sobre una segunda bomba de humo encendida por otra persona en el edificio de OSE, llevó a que la empresa presentara ayer una ampliación de la denuncia.

Fiscalía solicitó que el contenido del programa sea entregado en un pendrive para poder analizarlo formalmente. "Se espera que la semana que viene haya nuevas citaciones", confirmó Ramos a El País.

La defensa de Kreimerman, encabezada por los abogados Juan Fagúndez y Daniel Piedra, no se opuso a la prórroga de la investigación, ya que esperará las novedades de Fiscalía para eventualmente generar nuevas pruebas. Si bien aceptan que la bomba de humo fue encendida por el expresidente de Ffose, su objetivo es demostrar que el accionar no configura el delito imputado, según manifestaron en conversación con El País.

Afuera del Juzgado ubicado en la calle Juan Carlos Gómez, un grupo de personas esperó la salida de Kreimerman para enterarse del resultado de la audiencia. Luego de comunicarlo, el sindicalista habló con El País y dijo que "la investigación fue un intento de callar a los trabajadores".

"No hubo daños materiales ni consecuencias hacia los presentes. No es una crítica a Fiscalía, pero OSE no pudo aportar ninguna prueba de eso", aseguró y concluyó con que la manifestación era por un tema en el "que luego la Justicia terminó dando la razón" a los sindicalistas, en referencia a la suspensión de la obra en Arazatí por orden del juez Alejandro Recarey.

Foto: Agustín Carballo