Por Eduardo Barreneche
La reunión entre el fiscal de Corte, Juan Gómez y la fiscal de Flagrancia de 12° Turno, Gabriela Fossati, comenzó a las 11 de la mañana de ayer. Fossati llegó distendida y saludó a un grupo de personas que portaban carteles con consignas a su favor.

La fiscal arribó con la convicción de querer continuar con la investigación del caso Leal, tal como se lo transmitió a Gómez el sábado 18 en un correo electrónico donde le pedía que no la apartara de la causa. Incluso, en el mail le relató las evidencias que tenía en contra del dirigente frenteamplista Gustavo Leal.

Consultada por El Observador acerca de su posible separación del caso, la fiscal Fossati dijo que le remarcó a Gómez que “ahora sí” no considera que “sea conveniente” su traslado. “Podría generar una idea manifiestamente incorrecta a la ciudadanía, y porque las investigaciones han sido perfectas y ajustadas a las normas”, expresó.

Fossati investigaba a Leal por un supuesto delito de encubrimiento luego de que el dirigente frenteamplista visitara en su casa de Barra do Chui (Brasil) a los padres del excustodio presidencial, Alejandro Astesiano -hoy condenado y en prisión.

En la reunión de la mañana de ayer, el fiscal de Corte desoyó el pedido de Fossati. Y en un encuentro que duró apenas una hora le planteó que pasaría a ocupar la Fiscalía de Flagrancia de 16° Turno.

Fossati se retiró en una camioneta blindada de la Fiscalía, donde prácticamente no se la vio por los vidrios oscuros.

El ánimo de Fossati cambió en los últimos 90 días contando la feria judicial de enero donde los fiscales no trabajan. En audiencias realizadas en diciembre pasado, Fossati señaló a los senadores del Frente Amplio, Mario Bergara y Charles Carrera, que no temía por su seguridad. Que se desplazaba en su auto y que no había elementos para pedir protección para ella o para alguno de sus hijos, según supo El País.

No obstante, el 5 de marzo trascendió que la fiscal Fossati contaba con custodia. Luego sacó una licencia médica de 15 días y se le mantuvo la seguridad, dijo una fuente del caso a El País.

Nunca trascendió si Fossati había sido amenazada o sufrido presiones de algún tipo.

El racconto sobre la seguridad de la fiscal viene a cuento porque es posible que a Fossati no le desagradara del todo salir del caso por más que tuviera pruebas suficientes, según entendía, para formalizar la investigación contra Leal.

¿Cuáles fueron los motivos de Gómez para trasladar a la fiscal Fossati?

En una conferencia de prensa realizada a las 16:00 horas de ayer, el jerarca explicó que es “público y notorio” los “múltiples planteos” realizados por la fiscal Fossati manifestando “sufrir hostigamiento, inseguridad y presiones diversas”. Agregó que Fossati también reiteró su “idea” de ser apartada de la investigación de pasaportes falsos y el caso Leal.

Además, ante los medios, Gómez leyó tres mails de Fossati fechados este mes donde planteaba la posibilidad de que se la relevara del cargo.

Gómez aseguró que “obviamente” estaba “dando respuestas oficiales” a los planteos realizados por quien hasta ese entonces llevaba adelante el caso Astesiano.

Fossati pasará a la Fiscalía de Flagrancia de 16° Turno. Y su lugar pasará a ser ocupado por la fiscal de Delitos Sexuales, Sabrina Flores, quien se encargó de tomar declaraciones a Fossati y al fiscal Fernando Romano sobre el inédito incidente ocurrido en la Fiscalía a raíz de una denuncia de violencia de género.

La fiscal Flores es considerada por sus pares como una fiscal técnica y aguerrida. Su carrera comenzó en Cerro Largo en 2015. Allí Flores siguió hasta el final un caso donde un conocido empresario de Maldonado explotaba sexualmente a menores de edad.

Luego pasó a trabajar en Maldonado, donde estuvo al frente de la investigación de sonados casos, como el asalto a la joyería del hotel Enjoy de Punta del Este. Más acá en el tiempo, Flores inauguró la Fiscalía de Delitos Sexuales en Montevideo. Entre los casos que manejó, debió procesar por homicidio a una joven que mató a su padrastro. Además, investigó y supo que el hombre había abusado de ella cuando era una adolescente. Como sus hermanas iban creciendo, la imputada no quería que pasaran por el mismo infierno que ella. Por eso lo mató, contó una fuente del caso a El País.

Flores también investigó el choque de un camión en el puente de los accesos en Montevideo, donde murió el pizzero Pedro Recalde.

En 2019, además, el exsindicalista argentino Marcelo Balcedo y su esposa Paola Fie- ge demandaron a Flores por US$ 90.000 por presuntos daños producidos en su finca durante una serie de allanamientos.

En noviembre de ese mismo año, Flores comenzó a investigar la causa de explotación de menores conocida como Operación Océano. En mayo del 2020, fue reemplazada por la magistrada Darviña Viera.