TRAS DENUNCIA A DOS FUTBOLISTAS
“En las filmaciones no se aprecia la existencia de una situación de violencia sexual o amenazas hacia las denunciantes”, aseguró Juan Pablo Decia, abogado de los dueños del salón de fiesta.
El local está ubicado en Malvín. Allí se realizan muchas fiestas infantiles. Pero cuando el salón no está alquilado para un cumpleaños, sus dueños lo arriendan para reuniones de adultos. Eso fue lo que ocurrió el 8 de marzo de este año.
Unas treinta personas -entre ellos varios integrantes del plantel principal de Peñarol- asistieron al festejo. No trascendió el motivo del encuentro. Quizás se trató de una simple reunión de camaradería.
Al otro día, los propietarios del local constataron que se habían consumido más bebidas de las acordadas y detectaron roturas de instalaciones, según dijo a El País una fuente policial.
Los empresarios solicitaron a un profesional que se comunicara con el referente del plantel aurinegro, que participó en la reunión. Se trata del exjugador de la Selección Uruguaya y mediocampista mirasol, Walter Gargano.
Durante la conversación, el representante trasmitió a Gargano que las consumiciones extras y las roturas totalizaban unos $ 70.000, dijo la fuente.
Según trascendió ayer en ámbitos judiciales y policiales, el futbolista no objetó el planteo del comercio y respondió que los que participaron en la reunión iban a colaborar con el pago de los arreglos de los destrozos y de las consumiciones extras.
Ello se efectivizó días más tarde cuando los futbolistas abonaron los $ 70.000 como habían acordado con la empresa.
Para los dueños del local de fiestas, el asunto había quedado zanjado ahí. Y continuaron trabajando con total normalidad. No obstante, tres meses más tarde -el lunes 13-, dos mozas que trabajan en el local de fiestas presentaron una denuncia en la Fiscalía por abuso sexual y amenazas por parte de dos integrantes del equipo mirasol, el propio Gargano y Lucas Viatri. El caso pasó al fiscal de Delitos Sexuales, Maximiliano Sosa.
Ambos futbolistas declararan hoy ante la Justicia de Familia Especializada, que analiza casos de violencia basada en género. No trascendió cuando serán citados por Sosa.
"No vimos nada"
Acompañados por el abogado penalista, Juan Pablo Decia, los propietarios del local declararon ayer ante el fiscal Sosa sobre el episodio.
El representante del Ministerio Público preguntó a los empresarios si tenían conocimiento de los hechos denunciados por dos de sus empleadas del local sobre manoseos y amenazas; si recibieron algún tipo de comunicaciones de las trabajadoras y si en las filmaciones del evento surgía un incidente de índole sexual, señalaron fuentes del caso a El País.
Los empresarios relataron al fiscal que se trató de un hecho atípico lo sucedido en el local de fiestas el 8 de marzo pasado. “Había más gente de la pactada, algunos consumos por encima de lo establecido y roturas varias (...) El referente del plantel -por Gargano- pagó las roturas y los consumos”, señaló uno de los empresarios.
Su socio testificó que no sabía quienes participaron del evento aunque tenían conocimiento de que se trató de un encuentro entre compañeros del plantel aurinegro. En la reunión participaron unas 30 personas, dijo.
Ambos dueños del local declararon como testigos en la Fiscalía.
Al finalizar la audiencia, Decia fue consultado por El País sobre la citación: “Mis clientes convocados a instancia de una denuncia (de dos funcionarias del local). No tenemos ninguna información. En las filmaciones no se aprecia la existencia de una situación de violencia sexual o amenazas hacia las denunciantes”. Y agregó: “Si los responsables del local hubieran sabido que respecto a las denunciantes existieron conductas que revelan la existencia de acoso sexual en cualquiera de sus modalidades y amenazas, ellos habrían presentado la denuncia penal en forma inmediata”, advirtió Decia.
El profesional insistió en que, desde marzo hasta ahora, “no tuvimos comunicación alguna” de las denunciantes sobre un episodio ilícito durante un evento en el local, por lo que “nos llama poderosamente la atención el desenlace ocurrido”.
Las dos denunciantes continúan trabajando en el local de fiestas. “También somos muy respetuosos con el derecho que tienen las funcionarias de denunciar una situación que consideran violenta”, dijo el profesional.
Por su parte, la abogada defensora de las víctimas, Valentina Díaz, dijo en una nota con Subrayado (Canal 10) que “la denuncia la quisieron realizar en el mes de marzo, pero por un tema de agenda en Fiscalía” recién tuvieron fecha “para este mes”.
Ante esto, desde Fiscalía se precisó que el pedido de agenda fue realizado el 26 de abril.
El director de Comunicación de Fiscalía, Javier Benech, enfatizó en que no se trata de realizar un cuestionamiento al tiempo que decidan tomarse las víctimas para presentar la denuncia, porque se comprende “el impacto que esta clase de delitos implican”.
De todos modos, aclaró: “La fecha en que se solicitó la agenda es de abril, no de marzo (...). Hay una demora importante en la agenda, que alcanza en algunos casos a un mes, pero no es una demora de tres meses”.
Además, destacó que las denuncias se pueden presentar “las 24 horas, en cualquier seccional”, pero “a veces con este tipo de delitos de índole sexual se recurre a la vía penal, en Fiscalía”.
Consultada por El País, la abogada Valentina Díaz no confirmó ni desmintió que el pedido de agenda se haya realizado el 26 de abril, solo recalcó que “los hechos fueron en marzo, así lo establece la denuncia”.
Preguntado por Ovación, el presidente dijo que “este hecho no tuvo nada que ver con el club”.
“Es algo de la vida privada de los jugadores”
El presidente aurinegro, Ignacio Ruglio, dijo a Ovación que el club no puede ser relacionado con el episodio denunciado por dos trabajadoras de un local de fiestas de Malvín. “Es una cosa de la vida privada de los jugadores”, afirmó. Y agregó: “Lo que sí puedo decir es que el hecho no tiene relación con un ambiente laboral del club, ni con la concentración del plantel ni con un evento organizado por nosotros. No estaban en ningún lugar ni horario que tenga que ver con Peñarol”. Por otra parte, el consejero Jorge Nirenberg dijo a Ovación que “cuando la Justicia determine lo que pasó, Peñarol evaluará medidas si es que corresponden”.