El coronel retirado Eduardo Ferro, condenado a la pena de 21 años de penitenciaría por la desaparición forzada del militante comunista Óscar Tassino, declarará como testigo en el marco de la investigación que busca dirimir quién mató a Cecilia Fontana de Heber en 1978.

El militar declarará ante la Justicia este viernes a las 14.30 horas, según informó Montevideo Portal y confirmaron fuentes de la causa a El País. Ferro aparece nombrado en documentos de un archivo de José Nino Gavazzo sobre el envenenamiento de los vinos dirigidos a los dirigentes nacionalistas Mario Heber, Luis Alberto Lacalle Herrera y Carlos Julio Pereyra.

El archivo en cuestión fue incautado en la casa de Gavazzo y posee información sobre el episodio que terminó con la vida de Fontana, madre del ministro del Interior, Luis Alberto Heber.

Tal como informó El País, la investigación del fallecimiento de Cecilia Fontana fue retomada luego de varias pericias, las que no permitieron generar conclusiones con respecto a los responsables.

La semana pasada declaró, ante la jueza Silvia Urioste, Fernando Heber (uno de los hijos del matrimonio Heber-Fontana). A la salida del juzgado de la calle Bartolomé Mitre, Heber declaró a la prensa que se limitó a responder las preguntas de la jueza y que ahora tiene “esperanza de que se logre la verdad”. “Hace 40 años que concurrimos a los juzgados”, lamentó el hermano del ministro.

Su abogado, edil del Partido Nacional Javier Barrios Bove, declaró que la jueza dispuso tres nuevas audiencias que tendrán lugar en octubre, en donde declararán como testigos o indagados tanto civiles como efectivos policiales de la época, y que también se dispuso “una serie de nuevos peritajes”.

Según la información a la que pudo acceder El País, Fiscalía trabaja en torno a dos líneas de investigación fuertes. Por un lado se encuentra la que tiene como centro a la ex funcionaria policial María Lemos, a quien se le apunta por presuntamente haber escrito las cartas. Por otra parte, se busca profundizar en la pericia que dio como resultado la presencia de huellas dactilares del comisario Ricardo Zabala en las botellas.