GONZÁLEZ VALENCIA
El ministro del Interior dispuso el traslado de Gerardo González Valencia, un narco con proceso de extradición pendiente a Estados Unidos, por "por razones de política carcelaria".
Se trasladó a Gerardo González Valencia, un narco mexicano líder del cartel conocido como “Los Cuinis” preso en Uruguay desde 2016, desde la unidad 1° de Punta de Rieles a la unidad 3° del Penal de Libertad "por razones de política carcelaria", según informó el Ministerio del Interior este miércoles.
Más tarde, el ministro del Interior, Jorge Larrañaga, dijo que fue trasladado por "razones de política carcelaria y razones de seguridad", y porque su proceso de extradición a los Estados Unidos "está a punto de culminar".
El ministro dijo que él mismo estuvo visitando en esta jornada el Penal de Libertad para "saber las condiciones de reclusión".
Agregó que Gonzalez Valencia se encuentra en "un celdario único, alejado del resto de la población carcelaria, dentro de lo que marca las disposiciones vigentes en la materia".
González Valencia fue procesado por la Justicia uruguaya por lavado de activos el 23 de abril de 2016, junto con su esposa y otras cinco personas de su entorno. También fue acusado de cometer un crimen en la década de 1990 en California y se le imputa en una causa por tráfico de cocaína y anfetaminas en territorio estadounidense, motivo por el que el gobierno de ese país había pedido su extradición.
En mayo de 2016 González Valencia amenazó al entonces ministro del Interior, Eduardo Bonomi, desde su reclusión. Dijo que lo iba a "colgar del puente más alto", de acuerdo a lo que informó en ese momento el semanario Búsqueda. Las amenazas del narcotraficante habían sido realizadas el 26 de mayo de ese año, cuando le habían tomado declaración para conocer el origen de unos condimentos que fueron descubiertos en su celda la noche previa.
González Valencia dijo en esa oportunidad que la pimienta y el adobo que estaban en el lugar donde se encontraba recluido ya estaban allí. Cuando el policía que lo interrogaba le preguntó si tenía algo más para agregar, respondió que sí. "Me torturaron. Me tuvieron desnudo con temperaturas bajo cero. Si el ministro del Interior, Bonomi, sigue mandando sus guardias a torturarme que busque el puente más alto del Uruguay donde lo voy a colgar", dijo, y después firmó su declaración.