Redacción El País.
La jueza de Artigas Hilda Margarita Toriani imputó a Bruno Manini Ríos, hijo de los senadores Guido Manini Ríos e Irene Moreira, por un delito de violencia doméstica agravada y violación de domicilio. Esto ocurrió a partir de una denuncia que hizo su abuelo, el coronel retirado Roque Moreira.

El relato de hechos que hizo la Fiscalía apuntaba a que el imputado ingresó a la casa de su abuelo a través de una ventana y allí obtuvo la llave digital que daba acceso a sus cuentas bancarias por las que se hizo transferencias, según apuntaron corresponsales locales. Pero además, una estación de servicio de Artigas denunció otro evento donde el joven —de acuerdo a lo relatado— cargó nafta y, como no tenía dinero para abonar, dijo que iría por él y volvería, cosa que nunca ocurrió. La cifra aproximada faltante, estiman, es de US$11 mil.

La solicitud de la fiscal del caso, Beatriz González Galván, fue aceptada por la Justicia, que a su vez le impuso a Manini Ríos medidas cautelares. Deberá portar una tobillera electrónica por 30 días mientras continúa la investigación. Además, deberá fijar domicilio, presentarse una vez por semana en la seccional durante tres meses y la imposibilidad de comunicarse con la víctima y acercarse a menos de 300 metros. Esto último, por un plazo de 180 días.

La investigación avanzará analizando movimientos bancarios, filmaciones y testimonios.

Manini Ríos estuvo detenido desde las 00:40 de este martes, hasta luego de la audiencia de imputación realizada a las 17:30. Fue detenido en un apartamento en la rambla de Montevideo, por orden de la jueza subrogante Toriani. El jefe de la seccional 10 se entrevistó con la exministra Moreira, que estaba en el lugar, y los agentes se llevaron a su hijo, primero hasta una seccional en La Paz (Canelones) y luego a Artigas.

Al mediodía, fue controlada la legalidad de su detención y estaba previsto que en la tarde declarara en Fiscalía.

Aunque las acciones que la Fiscalía le atribuye a Manini Ríos podrían encuadrar en un delito de hurto o estafa, el Código Penal en su artículo 41 expone que no pueden ser inculpados por delitos contra la propiedad no violentos aquellos que lo cometan “en perjuicio ascendiente, o por el hijo natural reconocido o declarado tal, en perjuicio de los padres o viceversa, o por los afines en línea recta, por los padres, o los hijos adoptivos”. Es decir, no puede penarse a nietos que —en forma no violenta— roben a sus abuelos o padres.

Por eso, la Fiscalía optó por pedir la imputación de Manini Ríos por violencia doméstica, en forma patrimonial. Este delito lo cometen quienes ejercen “violencia física, psíquica,

Cedida a El País.

sexual, patrimonial o económica, sobre una persona con la cual tenga o haya tenido una relación afectiva, de parentesco o de convivencia, con independencia de la existencia de vínculo legal”.

Según reconstruyó El País, Manini Ríos trabajaba gestionando campos de su familia y asistía a su abuelo en tareas laborales. Era muy cercano a él.

A su vez, el delito de violencia doméstica se vio agravado por ser la víctima una persona mayor a 65 años. La pena por este delito va de seis meses a dos años de cárcel. El agravante implica un aumento de la pena de, mínimo, un tercio y como máximo a la mitad.

Sobre este punto se expresó en las redes sociales el profesor adjunto de Derecho Penal de la Universidad de la República (Udelar), Diego Camaño. Recordó la vigencia del artículo 41 y expresó: “Detener a alguien, en tal caso (si hubiera cometido hurto o estafa contra un ascendiente), sería ilegal pues nunca podrá ser condenado. Y no vale torcer la ley penal para aplicar un delito parecido, pues ello sería un fraude a la ley, en violación al principio de legalidad y la responsabilidad personal (nadie puede ser castigado por un delito que no quiso cometer)”.

Por el delito de violación de domicilio, se expone a una pena mínima de tres meses y máxima de 24 meses, si fuera condenado.