La campaña a favor de habilitar los allanamientos nocturnos estuvo nutrida por repetidas declaraciones de referentes de la coalición de gobierno en la que destacaban la utilidad de la herramienta en la “lucha contra el narcotráfico”. Por el Partido Nacional, este rol lo cumplieron —principalmente— el referente de la campaña de Álvaro Delgado en seguridad, Luis Calabria, y el ministro del Interior, Nicolás Martinelli. Mientras que en el Partido Colorado lo hizo el candidato Andrés Ojeda y sus asesores en seguridad, entre los que están el exfiscal Gustavo Zubía y el asesor ministerial Diego Sanjurjo. ¿Qué se plantean ante la derrota del plebiscito?
En el Ministerio del Interior entienden que la derrota es "multicausal". Algunas de las cuestiones que pueden haber afectado el resultado, señalaron fuentes institucionales, fue la falta de difusión de la iniciativa y el hecho de que no todas las listas de la coalición llevaban la papeleta "ensobrada". Aunque el ministro Martinelli, meses atrás, había declarado que veía con buenos ojos la posibilidad de una ley interpretativa, puertas adentro del ministerio eso no se ve como una opción para los meses que restan de gestión. Entienden que es un análisis que debe hacerse en el próximo período
Calabria dijo a El País que la derrota no afecta el programa de Delgado en materia de seguridad. “Hubiera sido mejor contar con esa herramienta, pero estaba contemplado que podía no ser aprobada”, explicó. Una de las principales propuestas del candidato blanco es la creación de un “modelo antimafia” al estilo italiano.
Como uno de sus principales defensores, Calabria entiende que los resultados son producto de que “al final se enfocó la atención en el plebiscito de la seguridad social” y que hubo problemas con la distribución de la papeleta.
En un sentido similar, el candidato colorado, Ojeda, sostuvo que “siempre es muy difícil” llegar al 50% más un voto que se requiere para aprobar una reforma constitucional. “Tu batalla más grande no es contra la aprobación, sino contra la desinformación”, expresó.
El día anterior el diputado Zubía, que entendió que “faltó campaña” para hacer que la ciudadanía se interesase por el plebiscito, dijo que “una (papeleta) se comió a la otra”, refiriéndose a la de la reforma de la seguridad social.
Tras la derrota del plebiscito, por ahora sus defensores no avizoran la posibilidad de utilizar otros mecanismos para poder habilitar la medida. “Seguiremos luchando contra el narcotráfico con las herramientas que tenemos”, resumió el asesor ministerial Diego Sanjurjo.
Zubía y Calabria mantienen el mismo tono. El diputado había propuesto durante esta legislatura una ley interpretativa de la Constitución en la que proponía que no se entendiera como “hogar” los lugares de venta de droga, por más de que viva gente allí. Consultado el domingo por la posibilidad de volver a presentar ese proyecto, dijo: “No es descartable, pero todavía es apresurado pensar en una ley interpretativa”.
Ojeda, como líder colorado, sostuvo: “A mí no me encanta, pero estoy dispuesto a discutirlo. Yo entiendo que por lo menos abre el flanco a la eventual inconstitucionalidad, se podría probar y bueno, si la Corte lo hace caer, lo hace caer, pero también es una realidad que se presta para un análisis jurídico más profundo”.
Calabria, por su parte, señaló que no es un “escenario” que los blancos se estén planteando.
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