Hoy, los jueces Gustavo Mirabal y Juan C. Fernández Lecchini, junto con el secretario de la Presidencia, Gonzalo Fernández y los expertos Horacio Soya, Zully Dominguez y Guido Berro, ingresaron al Batallón 14, situado en Toledo.

Dentro del batallón se delimitó y se cercó un sector de 80 a 100 metros cuadrados donde podrían estar los restos de la nuera del poeta argentino Juan Gelman, como también los restos de otros desaparecidos. Durante la recorrida se señaló con alta probabilidad el lugar donde estaría ubicada la tumba clandestina de María Claudia, de unos 5 metros de diámetro, gracias a la información que pasó el Ejército.

Se señaló también que no se esperará al informe del 8 de agosto para comenzar las excavaciones en este predio militar, sino que estas comenzarán esta semana y no se descarta que empiecen mañana.

La hija de María Claudia, Macarena Gelman García, también acompañó la comitiva, por pedido personal que formuló al secretario Gonzalo Fernández. Sólo ella tuvo permitido el acceso al lugar donde se encontrarían los restos de Maria Claudia.

El lugar recorrido fue señalado por el comandante en jefe del Ejército, teniente general Angel Bertolotti, después de una investigación interna en la fuerza, y de escuchar a dos de siete uniformados retirados, acusados de estar involucrados en ambos crímenes cometidos en 1976 por militares.

La argentina García fue secuestrada en Buenos Aires en agosto de 1976, cuando estaba embarazada, y desapareció en Montevideo después de dar a luz en noviembre de ese año. Se supone que fue asesinada.

Quinteros fue secuestrada de los jardines de la embajada de Venezuela en junio de 1976, cuando entraba a pedir refugio después de haber burlado a sus guardias policiales, que querían usarla como carnada para atrapar a otros militantes opositores. Oficialmente se informó en 2003 que fue ejecutada en noviembre de 1976.

El caso provocó un incidente diplomático con Venezuela, recién superado al retorno de la democracia en marzo de 1985.

AFP y El País