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D. FRIEDMANN Y L. COSTA DELGADO

Nueve de cada diez uruguayos están insatisfechos con la seguridad. La mayoría cree que es el principal problema del país y está desconforme con la actuación de José Mujica en este tema. Casi la mitad fue víctima de un delito en el último año.

Esos son algunos de los datos que surgen del "Barómetro Iberoamericano 2011", elaborado a partir de encuestas desarrolladas en abril de este año en todos los países de América Latina, Portugal y Estados Unidos. En Uruguay el sondeo abarcó a 400 personas. De ellas, 39% eran hombres, 64% trabajaba y 19% estudiaba.

El 60% de los encuestados uruguayos consideró que la "falta de seguridad" es el principal problema del país. Esa cifra convierte a Uruguay en el país con más proporción de personas que opinaron que la inseguridad es lo más preocupante. En Venezuela el tema también ocupó el primer lugar de las inquietudes pero en menor medida: el 54% de los entrevistados lo identificó como el tema más preocupante, mientras que en Argentina lo hizo el 44%.

A su vez, la "forma de actuar" del presidente José Mujica respecto a la seguridad es vista de forma crítica por los uruguayos: 74% opinó que es mala o muy mala, 17% "ni buena ni mala", 7% la consideró muy buena y buena.

El 88% de las personas encuestadas en Uruguay dijo estar "insatisfecho" con la seguridad ciudadana del país. Los robos o asaltos son vistos como el principal problema de seguridad (65%). Asimismo, es el país con más personas con esa percepción. Entre las inquietudes le siguen la venta de drogas (17%), los robos en casas o apartamentos (10%) y la violencia contra las personas (5%).

Cuando se les preguntó cuán seguros se sentían en su ciudad, municipio o barrio, 41% de los uruguayos respondió que se sentía nada seguro, 51% "algo" seguro y 7% muy seguro.

A su vez, se consultó si habían sido víctimas de delitos. La mitad (46%) respondió afirmativamente (la consulta implicaba también a su entorno inmediato). En concreto, 32% afirmó haber sufrido un asalto o un atraco, 10% un robo en su domicilio y 4% haber sido víctima de violencia.

Para mejorar la situación dos acciones fueron las que tuvieron más adeptos: aumentar la cantidad de policías (28%) y mejorar la capacidad de respuesta de las autoridades (28%). Casi dos de cada diez (18%) consideró necesario un "mayor involucramiento" de las Fuerzas Armadas. Además, 12% opinó que deben crear más programas de empleo y 11% más planes sociales.

INSTITUCIONES. La desconfianza hacia la Policía es otro aspecto que se destaca entre las respuestas de los uruguayos: 63% dijo no tenerle confianza.

El sondeo incluyó además la percepción sobre diversas instituciones. En Uruguay la educación es la que más confianza despierta: siete de cada diez (73%) confían en ella. Le siguen en nivel de confianza los bancos (62%), las Organizaciones No Gubernamentales, (57%) y las empresas privadas (50%).

Pero más allá de la confianza, también parecerían ser significativos los niveles de desconfianza recogidos en el sondeo en Uruguay.

El 62% de los entrevistados dijo no tener confianza en los partidos políticos; solo 32% respondió que sí la tenía. De todos modos, el nivel de desconfianza es el menor en toda la región.

Algo similar sucedió al consultar sobre el Parlamento: uno de cada dos ciudadanos (54%) dijo no tenerle confianza y tres de cada diez (34%) contestaron afirmativamente. Sin embargo, fue uno de los mayores índices recogidos, superado por Brasil (94%) y Venezuela (38%).

La Iglesia tampoco genera mayoritariamente confianza a nivel local: confían en ella solo tres de cada diez encuestados (31%), mientras que el 63% desconfía. La proporción es casi idéntica a la que hay sobre las Fuerzas Armadas: 31% afirmó que le generaba confianza y 62% respondió negativamente.

En cuanto a los sindicatos, el sentimiento de desconfianza primó: 64% dijo tenerlo. Mientras, la Justicia no resulta confiable para uno de cada dos ciudadanos (56%) y la Suprema Corte de Justicia despierta opiniones encontradas: 43% dijo que sí le tenía confianza y 44% que no. El estudio evaluó también la percepción hacia los medios de comunicación: 36% dijo confiar en la prensa y 40% en los noticieros de televisión.

La cantidad de uruguayos que considera "ni buena ni mala" la forma en que el presidente José Mujica desempeña su trabajo es similar a la de los que creen que es "buena o muy buena". El primer grupo representó el 39% de los encuestados por el "Barómetro Iberoamericano 2011", mientras que el segundo alcanzó el 38%. El 6% dijo que su desempeño es "malo".

De todas formas, al ser consultados directamente sobre si aprueban o desaprueban la gestión, el 52% respondió afirmativamente, en relación con el 36% que dijo desaprobarla.

El estudio para el que fueron entrevistados 400 uruguayos reveló que el narcotráfico es uno de los temas en que los ciudadanos menos aprueban la gestión del presidente. El 52% consideró que el desempeño frente a este tema es "malo o muy malo". El 22% dijo que es "ni bueno ni malo", y el 20% lo valoró como "bueno o muy bueno".

En la región, Brasil fue el país que registró un índice más favorable frente al tratamiento de este tema. Solo el 25% de los brasileños desaprobó la gestión de Dilma Rousseff ante el narcotráfico y el 51% la apoyó. El peor índice fue el registrado por Paraguay, adonde el 67% manifestó que Fernando Lugo desarrolla una mala gestión frente a este tema.

Al ser consultados sobre la gestión del presidente Mujica en relación con la educación, casi la mitad (46%) de los uruguayos respondió que actúa "bien o muy bien". Más de la cuarta parte (27%) opinó que lo hace "mal o muy mal", y para el 26% su forma de actuar en este tema no es "ni buena ni mala". En relación con el nivel de estabilidad política, el 44% de los encuestados a nivel local respondió que el desempeño de Mujica en este asunto es "bueno o muy bueno", en comparación con el 25% que lo consideró "malo o muy malo".

Más de la cuarta parte, el 33% dijo que su forma de actuar no es "ni buena ni mala".

En una escala de siete grados de felicidad, solo el 4% de los uruguayos se ubicó en los niveles inferiores.

56% de los entrevistados a nivel local por el Barómetro Iberoamericano 2011 se ubicó en los dos niveles más altos al ser consultado a cerca de qué tan feliz se sentía.

El 55% dijo que se siente insatisfecho con la gestión de su intendente.

Uno de cada dos uruguayos (52%) se siente insatifecho frente al servicio de recolección de basura, frente al 47% que se manifestó satisfecho frente a este servicio.

Ocho de cada diez (85%) se siente satisfecho frente a la calidad del agua y la energía, comparado con el 11% que manifestó una opinión desfavorable.

En relación con los niveles de justicia social del país, la mayor parte de los encuestados se ubicó en los niveles intermedios de una escala de valoración.

El estudio realizado a partir de encuestas formuladas en abril de 2011 incluyó preguntas sobre la vida de los ciudadanos y su satisfacción frente a ella.

La mayoría de los uruguayos se siente personas activas. Tres de cada diez entrevistados se ubicaron en el nivel más alto al ser consultados sobre qué tan activos se sentían.

Otra de las consultas realizadas fue qué tanto seguían aprendiendo. 36% se ubicó en el grado más alto, mientras que 26% lo hizo en los niveles intermedios.

31% respondió que es una persona generosa y casi cinco de cada diez (47%) respondieron estar muy pendientes de hacer felices a las personas que los quieren.

Las opiniones sobre si el país va o no por buen camino en la economía dividen a los uruguayos. El 46% de los entrevistados por el "Barómetro Iberoamericano 2011", respondió afirmativamente a si consideraba que el país iba por buen camino. El 45% opinó que esto no es así. Al ser consultados sobre la situación a nivel internacional, siete de cada 10 uruguayos (72%) dijo que el mundo va "por mal camino".

En referencia a su situación económica particular y cómo era esta si la comparaban con el 2010, el 44% de los uruguayos dijo estar "igual". El 43% está "mejor o mucho mejor" y el 12% siente que está "peor".

El relevamiento, que incluye datos de América Latina, Portugal y Estados Unidos, también registró las expectativas de los ciudadanos frente a los próximos meses.

Prácticamente uno de cada dos uruguayos (48%) piensa que en 2012 su economía estará "mejor o mucho mejor". El 42% consideró que estará "igual", mientras que el 9% dijo que estará "peor o mucho peor".

Uno de cada dos uruguayos tiene una imagen negativa de Irán y la misma proporción tiene una impresión desfavorable frente a Estados Unidos. El Barómetro Iberoamericano 2011 relevó la imagen de los uruguayos frente a algunos países. Frente a Irán, 51% dijo que la imagen es mala mientras que 11% dijo que es positiva.

Ante Estados Unidos 53% dijo tener una imagen negativa, y 38% positiva. Frente a Israel, asimismo, 48% de los uruguayos tiene una imagen negativa, y 15% una impresión positiva.

Al ser consultados sobre el grado de simpatía que le despertaban los distintos presidentes, Cristina Fernández de Kirchner fue la que menos adhesión despertó. En una escala de siete niveles, 56% la ubicó en los dos inferiores. Al ser consultados por Hugo Chávez, el 48% también respondió de forma desfavorable.

Dilma Rousseff se ubicó en el otro extremo de la escala. El 36% de los uruguayos manifestó que siente simpatía por la mandataria.