ASUNCIÓN, PARAGUAY | VÍCTOR RODRÍGUEZ
El ibirapitá de Artigas, en el patio de la escuela que lleva su nombre en Asunción fue alcanzado por la vejez. Se ha debilitado, y aunque está en tratamiento, apuran un homenaje para 2011, año del Bicentenario de la Revolución Oriental.
La historia dice que es el árbol junto al que José Gervasio Artigas pasó los últimos años de su vida, en el exilio paraguayo.
Alto y frondoso -aunque ha perdido follaje- ofrece un amplio abanico de sombra donde descansa un busto del prócer uruguayo,
El ibirapitá será declarado "Monumento Natural" por iniciativa del gobierno paraguayo, que prevé realizar en los primeros meses de 2011 un acto con altas autoridades de Uruguay, entre ellas el Presidente de la República, José Mujica.
Para ello se están desarrollando gestiones a nivel legislativo en Paraguay y se anticipa que la declaración se concrete en las próximas semanas.
La información recogida por El País en Asunción revela además la preocupación local por el estado sanitario que presenta el centenario árbol ubicado en el denominado "Solar de Artigas", un predio de cuatro hectáreas en el que está ubicada la escuela pública "José G. Artigas", en el barrio Santísima Trinidad, a 40 minutos de la capital paraguaya.
Pese a estar debidamente atendido, con el paso del tiempo se ha debilitado y es objeto de un cuidadoso tratamiento, informó la maestra Mariel Rosas, de Salto. La directora se encuentra en Piriápolis, Uruguay, acompañando al grupo de sexto año en su viaje de egresados.
ENTORNO ESPECIAL. "Mi niña no se quería ir, pero egresó en sexto grado y debimos ubicarla en otro colegio. No es lo mismo". Pilar es madre de tres pequeñas que concurren a la escuela "Artigas" que alberga a 250 alumnos, casi todos ellos residentes del barrio Santísima Trinidad, junto al Jardín Botánico, ubicado en uno de los extremos de la avenida Artigas.
Está "encantada" con la educación y la atención que reciben sus pequeños y al menos le queda el consuelo de que dos de sus tres hijas aún concurren a la escuela y podrán continuar estudiando en el Solar.
Mientras comparte un tereré con el cronista explica que las maestras uruguayas (ocho en total, dos paraguayas y seis "salteñas") son "muy buenas docentes y especiales en el trato con los alumnos; eso es lo que más valoramos de todo lo lindo de acá", resalta.
Esteban Palenti fue alumno de la escuela en la década de los `60 y siempre vuelve porque "el recuerdo que tengo de mi infancia de este lugar es insuperable, la calidad de la educación, la forma de ser de las maestras uruguayas que siempre nos trataron con respeto y con ternura, además de todo el legado histórico que tiene este lugar".
Una de las características que exhibe el centro educativo es la permanente presencia de turistas y visitantes, particularmente uruguayos, pero también ex alumnos paraguayos y sus familiares.
"Los niños y los docentes ya nos hemos acostumbrado a la presencia de mucha gente que viene a conocer el lugar. Los alumnos saben todo de aquí y comparten esa experiencia con los que llegan".
Verdadera embajada escolar
La Escuela Básica Privada Nº 2161 "General José Gervasio Artigas", está ubicada en el Solar de Artigas, que fue donado en 1903 por el gobierno paraguayo al gobierno de Uruguay, luego que éste entregara los trofeos de guerra de la Triple Alianza. En el año 1918 el Parlamento uruguayo decretó la construcción de esta escuela, con recursos nacionales, en la cual se dicta el programa educativo uruguayo, mantiene un cuerpo docente nacional -seis de las ocho maestras son de la ciudad de Salto- y tal como el resto de las escuelas públicas de Uruguay forma parte del Plan Ceibal.
Cinco de los seis presidentes uruguayos desde 1985 han concurrido durante su mandato a la escuela Artigas en Paraguay. Lo hicieron Julio María Sanguinetti, Luis Alberto Lacalle, Jorge Batlle y José Mujica, no así Tabaré Vázquez. Mujica estuvo en agosto de este año y según la agenda paraguaya, volverá en 2011.