Ronco explica que la dieta es considerada responsable de la tercera parte de los casos de cáncer de mama. Precisamente, el ex-director interino del Registro Nacional de Cáncer ha publicado varias investigaciones que analizan el impacto del consumo de carnes rojas y las grasas en las altas tasas de la enfermedad en Uruguay.

"Está fuera de discusión que el consumo excesivo de carnes rojas, tanto fritas como asadas, aumenta el riesgo a contraer la enfermedad", apuntó. En cuanto a las carnes blancas todo depende. Si el pollo se consume con piel y el pescado se come frito las chances se incrementan.

En cuanto a los lácteos; la leche entera, la chocolatada, los quesos gruyere y colonia y la crema chantilly también aumentan los riesgos. "Del mismo modo encontramos que son más protectores el yogurt descremado y el queso ricotta", describió Ronco. La ricotta tiene un alto concentrado de unas proteínas que tiene una capacidad antitumoral y antioxidante muy potente.

El consumo de aceites vegetales, como de maíz y girasol, así como el de margarina, es potencialmente perjudicial en función de su abundante contenido de grasas omega 6. "Las margarinas se comenzaron a utilizar para prevenir enfermedades coronarias, pero están alterando los metabolismos que conducen a la diabetes, a la obesidad y los que predisponen al cáncer de colon y de mama", explicó Ronco.

En estos casos hay que contrarrestarlos con consumo de omega 3, presente en varios pescados. "El aceite de oliva es muy bueno porque no se transforma negativamente en las frituras, pero además tiene un producto que tiene capacidad antitumoral llamado squalleno", agregó el médico.

Las frutas son aún más preventivas que los vegetales. Ronco destaca los beneficios de las frutas cítricas y de las naranjas en particular, por la presencia de flavonoides que están en la pulpa. Pero también son recomendables la soja, las lentejas, garbanzos o porotos y los repollos. El médico abogó porque "algún día de la semana el plato de lentejas sustituya a la carne de vaca".Factores de riesgo

- FAMILIa. Antecedentes familiares en grado de parentesco directo de cáncer de mama.

- MENSTRUACION. Las mujeres que tuvieron una primera menstruación demasiado precoz, ocurrida antes de los 12 años, y aquellas que han una menopausia tardía (posterior a los 55 años).

- FECUNDIDAD. Las mujeres que no han tenido hijos o los tuvieron después de los 30 años están más expuestas.

- ENFERMEDADES. Las patologías benignas de la mama, tras varios años de evolución, pueden llegar a malignizarse. También influye un antecedente personal de cáncer previo.

- OBESIDAD. También son más propensas las mujeres obesas fundamentalmente aquellas cuya obesidad se desarrolla a expensas de su abdomen (obesidad abdominal).

- NUTRICION. El consumo total de grasas y proteínas animales incide. Los depósitos grasos corporales actuarían como reservorios de carcinógenos liposolubres, que luego llegarían al epitelio de los ductos mamarios.

- ECONOMIA. Los países más desarrollados son los que tienen mayores tasas de cáncer de mama. Un dato particular de Uruguay: en la franja que va de Punta Carretas a Carrasco hay un 20% más de tumores que el resto del Montevideo urbano.