-¿Hasta dónde llegan los derechos de los policías agremiados?
-Este gobierno permitió la sindicalización de los agentes. Estos pueden reunirse, formar un gremio, reclamar por sus condiciones de trabajo, salario o respecto a su carrera funcional. Lo hemos discutido en el último Consejo de Ministro (lunes 14) y tanto el presidente de la República (Tabaré Vázquez) como quien habla entienden que los convenios internaciones por algo dejan por fuera y ligado a la legislación nacional la huelga de los militares y los policías.
-Entonces, ¿cómo deben movilizarse si no les está permitido la huelga?
-¿Usted cree que yo puedo sugerirles movilizaciones a los policías?
-Usted tiene experiencia gremial.
-Pero ahora soy la ministra del Interior. Ellos (los policías agremiados) tienen cabeza, libertad e imaginación.
-Frente a la Jefatura de Policía de Artigas, un comisario director de la Cárcel Departamental realiza una huelga de hambre por mejoras salariales para la Policía. ¿Qué opinión tiene sobre esa medida?
-No puedo juzgar la actividad de un ciudadano policía que cree que poner una carpa (en una plaza) o encadenarse es un derecho que le corresponde.
-¿Este policía podría incurrir en una falta disciplinaria?
-Si no va a trabajar no cobrará su sueldo. Es posible que esté en uso de la licencia. Creo en el diálogo. En la Policía hay muchos sindicatos -siete-, con los cuales me senté a conversar.
-¿Por qué pide a los policías que se organicen en un gremio único?
-Le dije a los dos gremios (Coordinadora de Sindicatos Policiales y Mesa Intersindical Policial) cuanto más unidad es mejor. Yo soy sindicalista y conozco el tema. Me parece mucho más inteligente tener un solo sindicato representativo y legítimamente electo por sus afiliados (La Policía cuenta con 28.000 efectivos y, según un censo dispuesto por el Ministerio del Interior, solo el 1% está agremiado). Eso otorga muchísimo más respaldo a las reivindicaciones. De otra manera, seguiremos trabajando así. Ojalá que se unan (los policías). Pero es una opción de ellos.