Ayer se cumplió una semana del asesinato de Álvaro Froste (16). A través de las redes sociales se había convocado a una marcha en su memoria, pero apenas un puñado de jóvenes concurrió. La Policía montó un amplio operativo que resultó innecesario.
Katerin tiene 17 años y estaba junto a Álvaro Froste y su novia cuando el joven recibió el disparo en el pecho. Ayer fue una de las pocas personas que respondió a la convocatoria: fue con otras dos amigas a la marcha frente al Montevideo Shopping, donde ocurrieron los hechos hacía exactamente una semana. "Álvaro era tremenda persona, más bueno que el pan, tremendo amigo. Un día yo me iba a pelear acá con una piba y él me dijo: `dejala por esa, porque te van a terminar lastimando`. Eso no me lo olvido más, porque si me hubiera peleado con la piba me hubieran terminando matando. Y él fue el único que me dijo eso", declaró Katerin a El País.
La joven recordó el día de la tragedia. "Se armó un puterío como se arma todos los domingos, pero éste no se pudo detener. Vino un loco con un arma y se peleó con una piba, y la piba le dijo: `yo ando con cuchillos y con todo`. Y el pibe le dijo: `bueno, que salte alguno de tus machos`. Nadie saltó, ni hizo nada. Y tiraron un tiro, que dijeron que fue al montón, pero no fue al montón, porque a Álvaro le pegaron en el pecho. El que le tiró el tiro se fue en una moto".
"Cuando llegaron los policías no querían hacer nada, querían esperar la ambulancia. Y yo les dije que el pibe se nos estaba yendo, que se nos estaba muriendo. Ahí fue cuando decidieron subirlo al patrullero, lo subieron todos los pibes. Y el primo de Álvaro fue con él al hospital, nosotros nos fuimos caminando. Nos enteramos que se había muerto por la televisión primero y después por la hermana", agregó Katerin.
Según la joven, las peleas y fricciones entre barras son frecuentes en ese sitio. Y el fatal desenlace de la trifulca, "se veía venir". "Nosotros siempre venimos. Y siempre decíamos que algún día iba a pasar algo, porque las bandas se peleaban, generalmente por un gorro o unos championes que uno le robaba a otro. Cuando nos reunimos acá, nos tomamos una coca, o los pibes se fuman algo o se toman un vino", añadió.
CONVOCATORIA. Nunca se llegaron a juntar más de diez jóvenes en la "marcha" convocada a través de una página de Facebook que tiene más de 5.000 seguidores. Había, sin embargo, casi medio centenar de policías custodiando el área. Y en algunos momentos, una veintena de periodistas que concurrió a la convocatoria, en la esquina de Luis Alberto de Herrera y Pablo Galarza.
La Policía esperaba que pudiera ocurrir un incidente entre "barras", habida cuenta de algunas amenazas y comentarios que se publicaron en las redes sociales. Pero la jornada, además de fría y lluviosa, fue extremadamente tranquila.
La semana pasada, la Justicia envió a prisión al joven que confesó ser el homicida de Froste. A.R., de 19 años, le dijo al juez que una semana antes del crimen hubo un problema en el mismo lugar, entre las mismas "barras". Y que compró el arma en la feria de Piedras Blancas para su seguridad.