Los militares Tomás Casella, Eduardo Radaelli y Wellington Sarli, extraditados en 2006 a Chile acusados por el secuestro y privación de libertad del químico Eugenio Berríos, podrían regresar a Uruguay a fines de 2012, cuando la Justicia chilena dé por terminado el juicio iniciado en su contra.
En septiembre de 2010, el juez chileno Alejandro Madrid condenó a los tres militares por los delitos de "secuestro" y "asociación ilícita", aunque hubo variaciones en las penas en función del grado de responsabilidad que le cabe a cada uno.
Así, Casella fue condenado a ocho años y dos días de prisión; Radaelli a cinco años y 62 días, mientras que Sarli fue quien recibió la sentencia menos severa: tres años y 61 días.
Actualmente, el fallo del juez Madrid está a estudio de la Cámara de Casación que deberá confirmar o revocar la sentencia, indicó Casella en diálogo telefónico con El País.
Luego, ya sea a pedido de los militares o la Fiscalía, el caso pasará a estudio de la Corte Suprema, en la tercera y última instancia del proceso, que finalizará a fines de 2012.
En ese momento, más allá de que sean absueltos o se confirme su sentencia, los militares podrán regresar a Uruguay, ya que un convenio firmado entre ambos países permite a los condenados cumplir la pena en su lugar de origen.
"Nosotros somos inocentes y esperamos no ser condenados en forma definitiva. El procesamiento y la condena se basaron en los mismos elementos, por lo que esperamos que se pueda revertir", dijo Casella.
Los militares, extraditados en abril de 2006, residen en Santiago bajo libertad condicional desde mediados de ese año. Desde entonces no han sido citados a declarar ante la Justicia, salvo en una ocasión en septiembre de 2010, cuando comparecieron a pedido suyo.
En 2008, el gobierno uruguayo hizo gestiones para que los militares regresaran a Montevideo, pero la solicitud fue rechazada por el juez Madrid.
Según Casella, el actual gobierno ha mostrado interés en su situación, por lo que se mostró confiado en que pueda haber otro planteo oficial. "Hicimos los contactos que se debían pero el interés partió de las autoridades políticas", dijo.