Hoy recibirán sepultura en Santa Lucía los restos de Nadia Cachés. Los exámenes forenses no han hallado trazas de violencia en los restos óseos, pero se mantiene en pie la hipótesis de un homicidio, lo que la Policía todavía continúa investigando.
El Instituto Técnico Forense (ITF) entregó a la familia de Nadia la totalidad de los restos hallados en Margat. Por ello la familia podrá, por fin, realizar su sepelio. El mismo tendrá lugar hoy a media mañana en Santa Lucía. Allegados a la familia señalaron a El País que no habrá velatorio, en cambio se realizará una misa en recuerdo a la joven. Las mismas fuentes allegadas a la familia de Nadia confirmaron, asimismo, que en una búsqueda realizada por ellos hallaron un nuevo grupo de huesos. Estas piezas, vértebras que resultaron más dañadas por la quema hecha por monteadores, fueron entregadas para su análisis al antropólogo forense Horacio Solla, quien ya había identificado a la joven con las piezas del primer hallazgo, principalmente el cráneo, que comparó con fotografías de la joven. Este método de análisis llamado comparación cráneo-fotográfica alcanza un 98% de certeza para establecer una identidad, según expertos.
La identidad fue confirmada poco después por el examen de ADN realizado en los laboratorios de Policía Técnica.
Fuentes judiciales indicaron que, tras la recolección de restos óseos en Margat, se llegó a completar un 90% de la estructura de la víctima. Sin embargo, las fuentes señalaron que no ha sido posible determinar de qué forma fue muerta la joven. "A nivel óseo, se pueden identificar heridas profundas, como las causadas por disparos de arma de fuego, heridas contundentes como un hachazo, no si fueron heridas a nivel de tejidos, como por ejemplo un cuchillazo en el abdomen o en el cuello", explicaron fuentes judiciales.
De todos modos, tanto a nivel forense como policial se tiene la convicción de estar ante un homicidio.
El caso ha avanzado poco. Hasta la fecha han declarado unas 87 personas, algunos de ellos en más de una oportunidad en la sede judicial. En su mayoría se trata del círculo de amigos y allegados a la joven, así como sus padres.
El entorno de la joven ha sido considerado vital para el esclarecimiento del crimen por parte de los investigadores del Departamento de Homicidios. Los detectives creen que solo una persona conocida pudo haber llevado a la joven hasta el lugar, dado que Nadia sabía defenderse -practicaba karate, entre otros deportes- y pudo haber hecho frente al atacante.
Nadia estaba desaparecida desde el 13 de diciembre de 2010. Había ido a visitar a una amiga en Santa Lucía, pero nunca regresó a su casa en Canelones. Un testigo, empero, asegura -y así lo confirmó hace pocos días en el juzgado- que la vio esa misma noche en la capital canaria.
Mientras se espera conocer, por fin, la verdad en torno a la muerte de Nadia, su familia y sus amigos podrán despedirla en Santa Lucía. (Producción: Renzo Rossello)