Acaba de ser electo presidente del Congreso Nacional de Intendentes y tiene un objetivo: profundizar la descentralización porque cree que es un motor de desarrollo.
Botana, por segunda vez intendente de Cerro Largo, afirma que el Partido Nacional como principal fuerza de la oposición tiene que hacer propuestas y marcar la agenda política. Para él, los liderazgos de Larrañaga y Lacalle Pou muestran debilidades por el desgaste tras un año y medio de lucha electoral. Cree que se recuperarán y los ve compitiendo en 2019.
—Fue electo presidente del Congreso Nacional de Intendentes. ¿Cuáles son sus expectativas?.
—La descentralización. La creación de municipios en todo el país les va a significar a los gobiernos departamentales un nuevo papel, la asunción de algunas cosas a las que no podemos darles la espalda. La infraestructura, por supuesto, pero también la salud y otros servicios sociales en los que el gobierno departamental debe estar presente más allá de todo.
—La pasada administración de José Mujica se caracterizó por tener una estrecha relación con las intendencias. ¿Cómo cree que se va a manejar esta relación con el presidente Tabaré Vázquez?
—Eso lo tiene que marcar el gobierno central. Hay una tendencia que viene surgiendo desde que empezamos con el gobierno de Vázquez, que fue intendente y conoce las demandas de los ciudadanos, los compromisos que debemos asumir los intendentes y que le ha dado un nuevo orden a esa relación poniendo a la Oficina de Planeamiento y Presupuesto como administrador de las demandas de los intendentes.
—¿El Congreso de Intendentes puede llegar a intermediar ante el gobierno nacional para ver una salida a las complejas situaciones financieras de varios departamentos?
—Por supuesto. Lo haremos para salvar los problemas financieros de los gobiernos departamentales, y ver las inversiones públicas y la participación en el Presupuesto para estos cinco años.
—Desde el Frente Amplio o desde el Poder Ejecutivo, alternadamente, se marca la agenda, los temas se imponen y se agotan, como los planteos sobre cambios al acuerdo con Google, la posible quita de subsidios a colegios públicos de gestión privada, la reforma constitucional, Antel Arena primero no, Antel Arena ahora sí, entre otros. De alguna manera se copa la agenda. En este escenario ¿qué espacio puede ocupar el Partido Nacional como la principal fuerza de oposición?
—Si un partido tiene propuestas, es protagonista. El problema de quedar fuera es cuando un partido no las tiene o cuando no tiene voluntad de construir. Yo quiero un partido con propuestas y voluntad de construir. En la descentralización, de la libertad e igualdad entre los ciudadanos, es donde tenemos la mayor obligación de construir políticas públicas, de presionar para que el reparto de recursos llegue de manera igualitaria a todos los ciudadanos, independientemente de si estamos en el gobierno o en la oposición.
—Le pregunto más como dirigente político del Partido Nacional que como intendente. ¿Hay espacios a ocupar por el Partido Nacional como oposición, teniendo en cuenta que el Partido Colorado está muy caído?
—Yo respeto al Partido Colorado, su posicionamiento ideológico, y no diría que está caído. Pero el Partido Nacional tiene una enorme responsabilidad con el país. Es el que tiene que hacer la propuesta.
—¿Pero cuál es el papel que debe jugar el Partido Nacional? ¿Ser más crítico con el gobierno?
—El Partido Nacional no se perdona no ser constructor de la República. Al Partido Nacional le va mal cuando no construye, y le va muy bien cuando propone, reivindica y encabeza el reclamo de un país más justo. No es un partido para decirle que no al país, sino nacido para construir la libertad y la igualdad, la descentralización.
—¿Eso quiere decir que debe manejarse menos con la crítica al gobierno y más con la propuesta?
—Es un partido de propuesta. Con la crítica solamente no le va bien a ningún partido, y menos al nuestro. El país, la patria es como una familia. A nadie que se ponga contra su familia le va a ir bien.
—¿Cómo ve los liderazgos de Jorge Larrañaga y Luis Lacalle Pou en el Partido Nacional? ¿Los ve fuertes?
—Hoy hay una tendencia, como sucede después de una elección, a que todos los liderazgos sufren debilidades. Luego se empiezan a potenciar a medida que se acerca el tiempo de una elección.
—¿Entonces ese momento de debilitamiento es el que vive hoy el Partido Nacional con sus líderes?
—No diría de debilitamiento sino un momento de tranquilidad electoral. Luego vendrán los tiempos de organización con esos objetivos electorales.
—Para la elección de 2019, ¿se imagina la misma dupla de precandidatos o espera que surjan figuras nuevas?
—El Partido Nacional es el único que tiene asegurada una renovación permanente porque es el único que elige a sus candidatos en una interna. Tiene los candidatos más jóvenes y nuevas propuestas. En el Partido Nacional nadie se puede dormir en el poder, hay que estar trabajando con la gente.
—¿Ve hoy a Lacalle Pou y Larrañaga peleando la interna de 2019?
—Hoy los veo bien.
Sergio BotanaDANIEL ISGLEAS