Se considera que una sociedad tiene una estructura envejecida cuando la proporción de personas de 60 años o más alcanza el 7%. Uruguay supera esa brecha desde 1960. Y la cifra actual es de 18%.
Así lo establece el documento Estadísticas de Género 2015, preparado por el Sistema de Información de Género de Inmujeres del Mides.
"El proceso de envejecimiento incide en el peso que poseen los grupos dependientes en la población total", señala el informe. En este sentido se expone que el Índice de dependencia total: relación entre la cantidad de personas dependientes (mayores de 65 años) y la no dependiente, va creciendo gradualmente, colocándose por encima del 20%.
"Desde el año 1996 se ha incrementado significativamente la proporción de personas dependientes mayores de 65 años, a la vez que se ha reducido levemente el peso de las personas menores de 14 años. Lo anteriormente expuesto pone en evidencia la necesidad de garantizar un sistema de seguridad social con equidad generacional, fundamentalmente de sus componentes vinculados a la protección a la vejez. Este hecho se torna en uno de los principales desafíos propios de un país con transición demográfica avanzada", advierte el trabajo de Inmujeres.
El documento también destaca que "dicho fenómeno incide en la cantidad de trabajo de cuidado que la población uruguaya requiere. Asegurar un cuidado de calidad de las personas dependientes entre los diversos proveedores de bienestar (Estado, mercado, familia y comunidad)".
El trabajo también señala que "los procesos de envejecimiento presentan claras diferencias entre la población femenina y masculina. Cuando se realiza un análisis desagregado por sexo de la población, se observa que las mujeres constituyen el mayor grupo demográfico del país".
Familias.
El informe también analiza la composición de los hogares en Uruguay. Sobre esto se señala que "la cantidad de hogares biparentales con hijos/as de ambos es la que se presenta con mayor frecuencia (27,9%)".
Los hogares monoparentales, en tanto, presentan un alto grado de feminización, "ya que los de jefatura femenina representan el 10,8%" y los de la masculina "no alcanzan el 2%".
INFORME DEL MIDES