Redacción El País
Dio un importante giro la investigación sobre las circunstancias en que una adolescente de 13 años resultó baleada en la ciudad de Maldonado. En primera instancia, la Policía había señalado, en base al testimonio de la joven, que en el marco de un intento de rapiña un delincuente le disparó, pero al avanzar la causa y al encontrarse en medio de contradicciones, la menor reconoció que le disparó un amigo.
Abocada al esclarecimiento del suceso, la Policía miró los registros fílmicos de la zona y tomó declaraciones a la adolescente y a testigos. Así determinó "contradicciones" porque "los hechos no concordaban".
Hasta que "en determinado momento la victima manifiesta que en realidad nunca existió una tentativa de rapiña, sino que se encontraba en casa de unos amigos en el barrio Maldonado Nuevo y en determinado momento a uno de los presentes (no quiso aportar datos) se le escapó un disparo sin querer y la hirió", consigna el parte policial.
De todas formas, no quiso continuar con la instancia penal, y la carátula del evento cambió de tentativa de rapiña a lesiones personales.
Según el parte policial anterior, el falso intento de rapiña había ocurrido sobre las 4:00, cuando la menor caminaba junto a una amiga por la calle y fueron abordadas por dos delincuentes en moto. En medio de un presunto forcejeo, ella había resultado baleada en la mano.
La historia indicaba que las jóvenes originalmente iban a encontrarse con dos amigos varones y que, tras el ataque, siguieron camino y llegaron a ellos, y los cuatro fueron juntos al hospital ayudados por una mujer que los llevó en auto.
Un médico constató una herida de bala en la mano una mano de la joven, con orificio de entrada y salida.