RECUENTO
Rocco Morabito se escapó a la medianoche del 23 de junio del año pasado de la ex Cárcel Central y aún continúa prófugo.
Hace un año que uno de los jefes de Ndrangheta, la mafia calabresa, está prófugo. A pesar de que el caso se transformó en un escándalo internacional, Rocco Morabito, que se escapó el 24 de junio del año pasado de la ex Cárcel Central, sigue sin aparecer.
La fuga de Morabito y otros tres reclusos tuvo un carácter cinematográfico. El delincuente se escapó por las azoteas del edificio. Eligió un día en que no estaba operativo el sistema de videovigilancia interno. Trepó los muros y apareció en el apartamento de una vecina. Después, se tomó un taxi, viajó a Minas, volvió a Montevideo y se le perdió el rastro.
Junto con Morabito se fugaron Leonardo Abel Sinopoli Azcoaga, Matías Sebastián Acosta González y Bruno Ezequiel Díaz. Uno de ellos tiene una causa por homicidio, otro por falsificación de documentos y el cuarto por delitos de estafa y fraude.?
Las cámaras de vigilancia del Ministerio del Interior permitieron conocer los pasos que siguieron Morabito, Acosta y Díaz -solo registraron a tres de los cuatro hombres- tras fugarse de la cárcel cerca de las 23:00 horas.
Gracias a dichas filmaciones se pudo determinar que primero se trasladaron a la pizzería Eatalian Style ubicada en Punta Carretas y que desde ahí se fueron en el auto de un hombre de ciudadanía rusa -socio de Morabito- hasta Lavalleja.
El italiano y el ruso volvieron esa misma noche a Montevideo y Morabito pernoctó en el garaje de la pizzería.
Más tarde, dos personas fueron detenidas y procesadas por encubrimiento al comprobarse que fueron las encargadas de alojar en Minas a Acosta y Díaz.
Las tres personas que se escaparon con Morabito fueron recapturadas. Sin embargo, el italiano sigue prófugo. El 7 de junio de este año Subrayado de Canal 10 informó que el mafioso estaría en la zona de la triple frontera de Brasil, Paraguay y Argentina, "donde está protegido por grupos criminales de la zona y se sospecha que también estén involucrados miembros de la policía local".
Por 13 años no se supo de él.
Morabito pasó 13 años en Uruguay sin ser detectado. Había colocado cientos de kilos de cocaína en Milán, Italia, proveniente de los puertos de Brasil. Se supo buscado y se radicó en Punta del Este. Allí se instaló junto a su familia.
Nadie lo molestó hasta que cometió un error. Una circunstancia familiar lo obligó a pasar la noche en un hotel de Montevideo y allí fue capturado. Al momento de su detención en 2017 se le incautó dinero, cheques por US$ 100.000, documentos de identidad falsos, así como varias armas y vehículos de lujo.
El prófugo es acusado de haber pertenecido entre 1988 y 1994 al cartel Ndrangheta de la mafia calabresa, una organización criminal dedicada al tráfico internacional de drogas en la que éste organizaba la distribución en la ciudad de Milán, en el norte del país.
Mafioso italiano y capo narco mexicano mantenían contactos en ex Cárcel Central
Según dijo una fuente del caso a El País en mayo,Morabito y Gerardo González Valencia, acusado por Estados Unidos de narcotráfico y extraditado en forma reciente a ese país, almorzaban juntos en Cárcel Central. Luego, el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, confirmó este dato en el programa Santo y Seña de Canal 4.
Ello era posible porque el mexicano disfrutaba de visitas conyugales que se llevaban a cabo en ese establecimiento.
Jorge Larrañaga, ministro del Interior, dijo a El País en ese momento que se estaba substanciando una investigación sobre los contactos entre Morabito y González Valencia, integrante de la organización conocida como “Los Cuinis”.
“Hemos puesto la información que teníamos en conocimiento del fiscal (Ricardo) Lackner”, agregó y señaló que algunas personas que intervinieron en esos episodios estaban dispuestas a declarar en la Fiscalía, pero reiteró que su intención no era entorpecer la investigación de la Fiscalía.
Además, dijo que “existieron irregularidades de todo tipo que convergieron e incidieron en la fuga de Morabito. Esa es la realidad de lo que pasó”. Asimismo, expresó que “hay responsabilidades muy fuertes” en el escape.
Larrañaga también recordó que el fiscal de Corte, Jorge Díaz, dijo que iba a haber sorpresas importantes cuando se conocieran los detalles de la fuga de Morabito.