POR PRESUNTA PESCA ILEGAL
Autoridades de la Armada Nacional describieron los indicios de que el buque con bandera china pescaba calamares y cómo este evadió la detención en primera instancia.
Autoridades de la Armada Nacional explicaron este jueves el procedimiento que siguieron para la captura tras una persecución del buque bandera china, que fue detenido por evasión y presunta pesca ilegal a principios de julio.
Como informó El País en el momento de la captura del barco, en una primera inspección la Armada no detectó carga de pesca. Sin embargo, Fiscalía informó poco después que este cargaba 11 toneladas de calamar y este jueves las autoridades dieron a conocer por qué realizaron la persecución e inspección del barco.
El jefe del Estado Mayor de la Flota, Andrés Debali, señaló en conferencia de prensa que el centro del comando de la organización hace todos los días un chequeo de los buques que se encuentran navegando en las aguas de la jurisdicción. Así fue como el 1 de julio de mañana se detectó a dos buques pesqueros de bandera china que se encontraban con máquinas paradas (también conocido como gareteando) dentro de la zona económica exclusiva de Uruguay, sostuvo Debali.
Luego de buscar información acerca de las embarcaciones, se detectó que estaban gareteando desde la tarde del día anterior. “A raíz de esta detección se empiezan a hacer averiguaciones. Esto ocurre más o menos a las 8 de la mañana. A las 10 de la mañana del viernes (1 de julio) en el centro de operaciones se deja de recibir la información” sobre la ubicación del barco, dijo. “Estaban en una zona, y a partir de las 10 de la mañana desaparecen”, añadió.
La Armada también notó que los buques se encontraban en la zona de pesca del calamar. Como es sabido que para esta pesca se aprovecha la oscuridad, “se chequeó cuáles eran las condiciones astronómicas, es decir, en qué fase lunar” se estaba, precisó Debali. El jefe del Estado Mayor de la Flota indicó que estaban en luna nueva, lo que supone noches totalmente oscuras y madrugadas sin luna, lo cual es “propicio para la pesca del calamar”.
“La división de Inteligencia del Comando de la Flota también buscó en fuentes abiertas a ver si había algo de información de estos buques. Se encontraron tres artículos de prensa que relacionan (a uno) con actividades de pesca ilegal en Argentina, otra en Perú e incluso menciona que este buque tiene un incidente con la prefectura naval Argentina, que lo estaba conduciendo hacia puerto por presunta pesca ilegal y el buque se escapa”, relató Debali.
A raíz de estos indicios, se envió una aeronave para verificar las actividades de los barcos. Este detectó a ambos buques, uno navegando y el otro gareteando.
El jerarca señaló que a un buque le salían cabos o líneas que se meten en el agua y un bollarín, lo cual constituye “una maniobra típica para la pesca del calamar”.
“Cuando retorna la aeronave y se toman las fotografías, la aviación naval detecta aproximadamente a unas cuatro millas de la posición de estos buques, ballenas. Toma fotografías de las ballenas y la Aviación Naval consulta a balleneros de la zona, particularmente a tres, a ver si podían descifrar cuál era la especie de este cetáceo”, dijo.
Las especies que se detectaron se alimentan “de cardúmenes de peces pequeños que están en proximidades de calamares o de crustáceos”, por lo que para la Armada fue otro “indicio de que podía llegar a haber calamar en la zona”.
Debali luego se refirió al buque que la Armada pudo capturar. Indicó que se lo detectó en horas de la tarde que el buque volvió a navegar, y al día siguiente se lo volvió a ver en posibles actividades de pesca.
El contralmirante Diego Vizcay resumió lo sucedido: “Mandamos el buque (ROU Maldonado) a hacer una investigación. Cuando vamos a acceder al buque (de bandera china) ellos no son colaborativos y se van, no dejaron subir a visitarlos”, lo cual es un derecho de la Armada Nacional.
En estas visitas, señaló, se constatan los permisos del buque y otros elementos, y si el mismo está en infracción se lo apresa.
Debali compartió qué sucedió en una comunicación que se estableció con el buque el día previo a su detención: “Las comunicaciones duran cerca de una hora y 20 minutos”, en las que se les informa que se les habla de la Armada.
La Armada le comunica al personal del buque que este será visitado una vez se tenga la autorización. Desde el buque contestan que entienden la situación. La Armada pregunta de qué costado se puede poner la escalera para abordar y desde el barco comunican que en el lado izquierdo, describió.
“Nosotros los seguimos y al otro día a las diez de las mañana pararon, colaboraron, nos dejaron subir”, dijo Vizcay. “Por eso el buque se trae a puerto, al tratar de evadir o no colaborar en una primera instancia”, precisó el contralmirante.
Por su parte, Jorge Wilson, comandante en jefe de la Armada, sostuvo que “en el momento en el que se hace la inspección en el mar, no se constata pesca, pero por haberse evadido, por los indicios que se tenían, igual se decide traerse al puerto de Montevideo”.
“El barco tiene cámaras frigoríficas de su pesca y cámaras frigoríficas para los víveres de la gente que vive a bordo. En esa otra cámara es que aparecen entre 11 o 12 toneladas de calamar embolsados”, destacó.
En la conferencia, las autoridades resaltaron que las apariencias del barco indicaban que estaba en tarea de pesca, y que si este hubiera dejado a la Armada subir cuando estaba en su posición inicial, quizá ahí se hubiera constatado algo en primera instancia.
“Tuvieron doce horas navegando, pudiendo vaciar, pudiendo hacer lo que sea”, dijo el contralmirante en este sentido.
Versiones encontradas
El pasado lunes, el portal especializado defensa.com afirmó que el buque no estaba pescando en la zona económica exclusiva de Uruguay, como afirma la Armada Nacional, y que el calamar encontrado había sido procesado previamente.
Consultado sobre este punto, el ministro de Defensa, Javier García, dijo el pasado martes en rueda de prensa que el tema todavía continúa en investigación y que la actuación de los tripulantes es parte "de las averiguaciones que se están haciendo". "Hay un tema de ver si los procedimientos que se pidieron por parte de la Armada Nacional se cumplieron", agregó en nota consignada por Telemundo (Canal 12).
A su vez, el presidente de la Cámara de Agentes Pesqueros Extranjeros, Aldo Braida, dijo este jueves a Subrayado (Canal 10) que, "según manifiesta el capitán, se siente hostigado por una maniobra nocturna, sin identificarse correctamente, y pone rumbo hacia puerto". "Lejos de estar escapando, (el buque) se puso a resguardo, y cuando pudo tener una identificación positiva de la Armada, el buque se detuvo y fue inspeccionado", añadió.