El Ministerio del Interior divulgó ayer cifras de delitos del primer trimestre de 2023, en comparación con el mismo período de años anteriores. Según detalló la cartera, en los meses de enero, febrero y marzo la cantidad de homicidios descendió un 7,9% en comparación con lo que fue el año pasado.
En el primer trimestre del 2023 los homicidios fueron 93. En el mismo período del 2022 fueron 101.
“En Peñarol prácticamente desaparecieron los homicidios”, señaló a El País una fuente del Ministerio del Interior para dar explicación a este fenómeno. Para la cartera hubo dos medidas determinantes que sirvieron para conseguir esto: aumentó el patrullaje, pero además se instalaron varias cámaras de seguridad.
El plan del ministerio es que haya 2.200 cámaras operativas en las zonas conflictivas del oeste y el norte de Montevideo. En Peñarol fue donde se hizo el trabajo más importante en este sentido
Durante todo el año pasado, el barrio Peñarol estuvo continuamente en agenda por una frecuencia inusual de homicidios. En mayo y noviembre hubo una ola de asesinatos, en el primero de estos meses incluso ocurrieron cinco homicidios en 24 horas. Esto se tradujo en el saldo final de 2022, que lo posicionó como el barrio más violento con un total de 21 asesinatos.
“Se volcaron más recursos humanos y materiales en esos lugares de enfrentamiento”, dijo también la fuente de la cartera. Y destacó que la tasa de aclaración de los asesinatos fue de 58% en este primer trimestre, una cifra mayor al último promedio anual que fue de 50 por ciento.
Según los datos que maneja el Ministerio del Interior, los crímenes entre miembros de bandas de delincuentes son los que predominan. De hecho de los 93 homicidios del trimestre, solo seis derivaron de rapiñas. En la gran mayoría de los casos están involucradas personas que tienen antecedentes o anotaciones policiales.
Otros crímenes
Los hurtos también registraron un descenso, pero del 5,8%. Según las cifras, fueron 1.820 hurtos menos en los primeros tres meses del 2023 en comparación con el mismo período de 2022. Con las rapiñas, en cambio, hubo un incremento del 2,6%.
Para la cartera esta diferencia “es baja”. “En el año estamos hablando de 26.000 rapiñas, 200 de diferencia es una oscilación”, advirtió la fuente.
Las denuncias de violencia doméstica tuvieron un incremento de 4,3% y las de abigeato una baja del 11,4%. Los datos fueron procesados por el Observatorio Nacional sobre Violencia y Criminalidad del Ministerio del Interior.
En 2022 la cifra de homicidios ascendió a 383, un 25% más que en 2021, cuando hubo 306. Al considerar la cifra de homicidios anuales desde 1989, el 2022 es el tercer año con el mayor saldo de asesinatos de la historia, más arriba está 2019 y el récord continúa siendo 2018 con 421.
El aumento de los homicidios es una tendencia que excede a las distintas administraciones de gobierno. El año pasado hubo 99 casos más que un quinquenio atrás, en 2017.