Redacción El País
Un hombre de 25 años fue condenado a 10 años de prisión por haber participado en un homicidio, y por estar vinculado al tráfico de estupefacientes, armas y a casos de receptación. La Policía sigue buscando a un segundo participante del asesinato, quien efectuó los disparos que fueron mortales para un hombre e hirieron a otro.
El crimen ocurrió el viernes en la Avenida Francisco Piria de la ciudad de Piriápolis, cuando desde una moto con dos ocupantes comenzaron a disparar contra una camioneta, en la que también iban dos personas.
Mientras la Policía se dirigía hacia el lugar, encontró a un hombre de 31 años herido de bala en un terreno baldío, que resultó ser uno de los ocupantes de la camioneta. Tenía cuatro heridas de bala en el tórax y una en la cabeza. Finalmente murió.
Minutos más tarde, se presentó en una seccional policial el conductor de la camioneta, de 40 años, quien aseguró haber seguido manejando luego de que su acompañante se bajara para intentar escapar. El vehículo mostraba varios impactos de bala, y tras ser revisado por un médico se constató que el hombre también había recibido un disparo sin salida por la espalda.
La investigación continuó y el lunes se llevaron adelante allanamientos en la ciudad de Pan de Azúcar, donde se detuvo a uno de los participantes del crimen, de 25 años. En el procedimiento también se incautó la moto que utilizaron para el asesinato —que había sido robada en Montevideo hace varias semanas—, casi dos kilos de droga que aún no ha sido analizada, cartuchos, un rifle y dinero en efectivo.
Tras ser detenido, el joven —que cuenta con antecedentes penales— fue condenado por proceso simplificado a 10 años de prisión, por los delitos de homicidio, suministro de estupefacientes, tráfico interno de armas y municiones, y receptación.
Ahora, los investigadores buscan dar con el paradero de una segunda persona, que efectuó los disparos.