Redacción El País
El chofer del ómnibus de Cutcsa de la línea 121 que chocó en la rambla de Pocitos el pasado 26 de octubre fue dado de alta este lunes, luego de más de tres semanas de internación. No obstante, a solicitud del fiscal Leonardo Morales, fue detenido en el acto.

Según informaron fuentes de la Armada Nacional (porque el siniestro ocurrió en una zona de su jurisdicción), al chofer lo detuvieron funcionarios de la Prefectura de Trouville a pedido del fiscal, para que vaya a declarar.

Desde la Fiscalía aclararon que aún resta conocer el resultado de algunas pericias, por lo que todavía no se va a tomar una resolución. Una vez declare el conductor este lunes, asistido legalmente por el abogado Andrés Scavarelli, quedará en libertad a la espera de una eventual audiencia. De todas formas, habrá medidas limitativas como la fijación de domicilio y la retención del pasaporte para que no pueda salir del país.

El hombre de 65 años, que estaba a punto de jubilarse cuando ocurrió el siniestro, permaneció en CTI. No obstante, su estado de salud le permitió dar una primera declaración a los pocos días del siniestro ante funcionarios de la Prefectura.

Una vez que le pidieron que relate lo vivido en la playa de Pocitos, él respondió: "Entré a mi turno el sábado 26 de octubre del corriente año como conductor del coche n°149 de la línea 121 a la hora 04:24 en la Planta Añón. Salí expreso a terminal Punta Carretas, 06:10 aproximadamente continúo circuito a la Ciudad Vieja sin recordar nada más hasta despertar en CTI".

El presidente de Cutcsa, Juan Salgado, habló el pasado jueves sobre el accidente del ómnibus de la línea 121 que impactó contra la rambla y terminó en la playa Pocitos en la jornada del sábado 26 de octubre.

En entrevista con Informativo Sarandí (690 AM), Salgado señaló que la pregunta "que todos" se hacen es cómo ocurrió el siniestro de tránsito en el que murió una mujer de 55 años. "Tiene características muy especiales el accidente. No solamente por lo que pasó, lamentablemente. Sentimos tristeza, un dolor tremendo por los familiares y por las personas que les ha pasado algo. Sentimos rabia porque al día de hoy no sabemos exactamente cuál fue el motivo", aseguró Salgado.

"Si ese accidente no se daba a las 7:40 y se hubiese dado una hora y media después, en un momento de elecciones donde toda esa esquina y ese lugar estaba lleno de muchachos que estaba militando por un grupo político o el otro, hubiese sido realmente todavía muchísimo peor", consideró Salgado.

Foto: Francisco Flores

Las horas previas al accidente fueron duras para el conductor, relataron funcionarios de Cutcsa a El País. Como su socio había sido suspendido semanas atrás, el chofer hacía en ocasiones doble turno. Pasadas las 22:00 horas del día anterior al siniestro, el conductor hizo el horario nocturno y continuó en la mañana de ese sábado.

Entre un turno y otro, uno de sus compañeros lo vio en la Aduana (en la calle Lindolfo Cuestas y Washington) tirándose agua en la cabeza con una regadera. Dos conductores de Cutcsa confirmaron esta versión.