INVESTIGACIÓN
"Es personal al cual la cadena de mando le otorga la confianza para trabajar con ese tipo de material, que es sensible, y la función que realizan es el control de stock", dijo el vocero del Ejército.
El sábado, un adolescente de 14 años confesó que mató a un hombre de 26 en una fiesta celebrada en el barrio Plácido Ellauri. El arma que utilizó para cometer el crimen, una Glock 9 mm, pertenecía a un depósito del Ejército Nacional y faltaba de la dotación del Servicio de Material y Armamento (SMA), según confirmó el Ejército en un comunicado.
Además de esa pistola, tras una investigación realizada de urgencia, se comprobó que faltaban otras dos de igual calibre en los depósitos de armamento del SMA. "Paso siguiente, se dio intervención a la Justicia Militar y se inició una Investigación de Urgencia", además de la denuncia policial, indicó el Ejército.
Este lunes, según informó MVD Noticias y confirmó a El País Pedro Gómez, vocero del Ejército, se dispuso que seis militares que se desempeñan en el SMA "están siendo indagados y mientras dure la indagatoria no cumplen las funciones que venían realizando habitualmente en el depósito de armamento".
“Este personal es de confianza, se entrena específicamente para tener acceso a depósitos que son restringidos”, explicó esta tarde Gómez en conversación con Subrayado (Canal 10). El establecimiento es "el depósito de la reserva general del Ejército", agregó.
Los individuos investigados son “el núcleo que trabaja más cercano al depósito”, dijo. “Son militares del Servicio de Material y Armamento, gente que está preparada en el manejo de armas, que realiza mantenimiento”, afirmó.
“Es personal al cual la cadena de mando le otorga la confianza para trabajar con ese tipo de material, que es sensible, y la función que realizan es el control de stock, mantenimiento del material que está stockeado, el depósito de armas”, señaló. Estas armas no son solamente las cortas, como las Glock 9 mm, sino que también las largas y las colectivas.
“Es un depósito muy importante, con una responsabilidad muy grande, y por eso se habla de que es personal de confianza”, resumió el vocero.
Con respecto al control de las armas, Gómez dijo que el Ejército tiene un procedimiento estándar que se realiza el último día de cada mes, en el que se hace una “revista física y ocular de todos los elementos que corresponden a las armas, el arma en sí, accesorios, cargadores y municiones”.
“Eso se tiene que reportar a través de la cadena del mando y llega al Comando General del Ejército antes del 5 de cada mes”, añadió.
“No teníamos noticia de estos hechos hasta esta situación que se dio”, señaló. “En la próxima inspección iba a detectarse esto, que lamentablemente se detectó a través de la incautación del arma en la vía pública”, dijo.
“Son armas nuevas que no estaban asignadas a ninguna unidad, estaban en reserva”, detalló Gómez.
Este lunes, el adolescente que utilizó el arma militar fue condenado a dos años y seis meses en el Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (Inisa) por el homicidio, informó Fiscalía. En su declaración, dijo que un hombre había querido abusar sexualmente de él y de su hermano, por lo que le disparó con el arma de fuego que encontró en un ropero.