Redacción El País
El delincuente Erwin "Coco" Parentini, conocido por su vinculación con asesinatos en el mundo de las hinchadas del fútbol uruguayo, dio una entrevista desde la cárcel de Santiago Vázquez, el ex Comcar, donde contó cuál es su situación actual y además brindó su visión de la violencia que se vive en el país.
En entrevista con el programa radial Informativo Sarandí, Parentini, de 32 años y varias décadas de cárcel por delante, denunció que su reclusión es como "estar cautivo, como recordando los viejos tiempos, una dictadura".
Sostuvo que, por ejemplo, lo despiertan a las 7:00 de la mañana "golpeando una reja", y que no tiene "una distracción, una actividad". Es que, por estar en un módulo de máxima seguridad, está "24 horas encerrado". Lleva "dos años y seis meses así", medida que se tomó luego de que ordenara desde la cárcel el homicidio de Lucas Langhain, el hincha de Nacional asesinado durante los festejos por la obtención del Campeonato Uruguayo en 2019.
Parentini está condenado también por otros delitos. Por ejemplo, como coautor del ataque a balazos a un hincha del Flamengo en 2021, cuando se jugó la final de la Copa Libertadores en el Estadio Centenario. También fue condenado como coautor del homicidio de Renny Auditore Ferreira, otro barra de Peñarol, que murió acribillado de 15 disparos. Previamente había cometido rapiñas.
Días atrás anunció que presentará un habeas corpus ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por sus condiciones de reclusión.
"La familia está sufriendo destratos. Tenemos un salón donde no hay baños. Mi hija tiene siete años, la conocí acá. El otro día vino y fue al baño y vio una rata muerta. Eso es lo que me tiene desesperado y muy enfadado", aseguró Parentini.
"No vengo a victimizarse, soy consciente de que tengo que purgar penas, pero en condiciones más o menos bien, humanas, para mí y para mi familia", indicó.
Sobre su historia de vida y cómo llegó a ser un delincuente de extenso prontuario, contó: "A los 15 años fui padre y no tuve herramientas como para poder estudiar y lastimosamente elegí este camino y empecé por hacerme cargo. Nunca tuve padre, me dejaron solo y no quise lo mismo para mi hija. Lastimosamente no tuve otra que hacer distintas cosas para poder llevar el plato de comida a casa. Sé que no está bien, pero es mi forma de vida".
Pese a los años que le restan de reclusión, más de 40, aseguró: "No creo que pase toda mi vida aquí".
Por otro lado, Parentini aseguró que "la violencia se combate con violencia. Mientras que en los barrios no hay jardines, las plazas están llenas de pasto, el Estado está ausente, hay gente que está presente, y ese es el problema". Además, explicó que el narcotráfico tiene más poderío incluso que la Policía más preparada para enfrentarlo: "Escucho a un político decir que enfrentan duro al narcotráfico cuando la Republicana tiene un fusil 9mm y en un mes incautaron cinco AR-15" que son de mayor calibre.
Parentini: "No siento ningún tipo de arrepentimiento"
El delincuente, en otro tramo de la entrevista, manifestó: "Casi todas las personas (víctimas) fueron con antecedentes penales, o sea, no lastimé a un taxista, a un verdulero. Sé que tengo que pagar por eso pero sinceramente hoy no siento ningún tipo de arrepentimiento, no le voy a mentir".
Además, dijo que "hay muchas razones" por las que puede mandar a matar a alguien, y que los sicarios pueden cumplir con el pedido "por amistad, a veces no es todo dinero".
"La violencia no conduce a nada, produce más violencia. Ese chamuyo barato de que estamos dando un duro golpe al narcotráfico no va por ahí, va por darle una enseñanza a los niños. Es muy precario todo", reflexionó.