Redacción El País
El Hospital Emilio Penza, ubicado en Durazno, fue escenario de un episodio violento este último martes: un hombre ingresó a la sala de un paciente, cuando finalizaba el horario de visitas, y le disparó en un glúteo.
El hombre estaba internado luego de sufrir un accidente de tránsito y presentaba una fractura en una pierna. Además, la Policía lo investigaba por estar presuntamente involucrado con una banda criminal, que estaba en conflicto con otra organización delictiva.
Ante esta situación el Sindicato Médico de Durazno resolvió realizar un paro de 24 horas como señal y "medida excepcional para visibilizar la gravedad de los hechos". La decisión fue apoyada por la Federación Médica del Interior (FEMI) y no afecta ni a la atención de las emergencias ni a la de los pacientes internados.
El comunicado del Hospital de Durazno
Este miércoles el Hospital de Durazno emitió por su parte un comunicado en el que "expresan su mayor preocupación" en relación a los "hechos de violencia" ocurridos en las instalaciones asistenciales.
"Queremos transmitir tranquilidad a los funcionarios, usuarios y acompañantes, que estamos tomando todas las medidas necesarias para regularizar la situación, disminuir los riesgos y prevenir una situación similar", sostiene la misiva.
"Seguiremos trabajando en pro de mejorar las condiciones laborales y la atención en salud de toda la población", agrega.