Redacción El País
Un ciudadano uruguayo, Avedis K., de 57 años, y sus dos hijos nacidos en Argentina, integran el grupo de nueve personas investigadas por la muerte de Tomás Tello Ferreyra, de 18 años, ocurrida en la madrugada de este lunes en una playa de Santa Teresita (Provincia de Buenos Aires).

En la tarde de ayer, los detenidos eran indagados por la Fiscalía argentina. Uno de los hijos del uruguayo, de 21 años, fue señalado por las pesquisas policiales como el autor de la puñalada mortal a Tello Ferreyra.

El joven detenido se desempeña como vendedor ambulante y tiene un antecedente penal por un hurto cometido en 2023. En tanto, la víctima Tello Ferreyra trabajaba como albañil.

Todo comenzó minutos antes de las siete de la mañana del lunes, cuando Tello Ferreyra festejaba con sus amigos el Año Nuevo en la playa de la costa bonaerense. En determinado momento comenzó a ser golpeado y perseguido por una decena de personas, por lo que trató de huir del lugar.

“En la playa no había nadie. Tomi (su hijo) salió corriendo. Corrió seis cuadras y no había policías”, dijo Samanta, la madre del adolescente asesinado, al diario argentino La Nación.

En ese contexto, Tello Ferreyra buscó refugiarse en un domicilio ubicado entre la calle 44 y la avenida Costanera. Pero no pudo lograrlo: fue interceptado por la patota en las adyacencias del inmueble. Luego de ello, el grupo de personas comenzó a atacar al joven de 18 años a pedradas, botellazos, puntapiés, golpes de puño y al menos un arma blanca. Como consecuencia del ataque, Tello Ferreyra, oriundo de la localidad vecina de Mar del Tuyú, sufrió al menos una herida punzocortante en el tórax, por lo que tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital de Santa Teresita, donde falleció.

“Una chica que no lo conocía a mi hijo también llamó a la Policía. Ese es el enojo de la gente”, dijo Samanta en relación con las protestas que se dieron desde la tarde del lunes frente a la comisaría, por parte de muchos habitantes de Santa Teresita, debido a la inacción de las fuerzas de seguridad.

Los investigadores señalaron que hubo varios testigos del crimen y que, producto de la pesquisa, se logró la detención de las nueve personas, dos de ellas, menores de edad.

Con respecto a las detenciones, una fuente de la investigación afirmó que las capturas de siete de los agresores se dieron minutos después del hecho, tras ser visualizados por cámaras de seguridad.