Sobre la madrugada del pasado 25 de diciembre, una explosión sorprendió a los vecinos en el corazón del barrio Pocitos. Según se manejo de forma preliminar en la investigación, el estallido de un termotanque de 60 litros habría provocado los daños.

Sobre las 02:20 de la mañana la Policía fue alertada a través de varios llamados al Servicio de Emergencia 911, por los vecinos de la zona, quienes escucharon el estruendo y fueron los primeros en acudir al lugar para ver qué sucedió.

Sobre la calle -en la intersección de las calles Benito Blanco y Ramón Masini- aparecían los vidrios estallados del quinto piso, un colchón y utensilios de limpieza que la explosión desprendió del lugar. Bomberos ingresaron al edificio y encontraron en el apartamento a una señora de 59 años que no podía moverse debido a heridas, pero con vida.

Personal médico constató posteriormente que la mujer había sufrido politraumatismos graves y una fractura expuesta en su pierna izquierda.

Según informó el vocero de Bomberos, Simón Burlón, la “energía de la onda expansiva” habría provocado los daños a la mujer, quien se encontraba durmiendo cuando sucedió la explosión y fue golpeada por objetos que salieron volando desde el baño.

El personal del Cuartel Centenario que asistió al lugar estabilizó a la mujer en una camilla y la descendió a planta baja, desde donde fue trasladada al Sanatorio Americano para ser intervenida.

Al momento no se conocen los detalles sobre qué ocasionó la explosión del calefón, pero, según informó Bomberos, debido a la destrucción estructural generada por la onda expansiva, se solicitó apoyo al arquitecto de guardia de Seguridad Edilicia de la Intendencia de Montevideo y a personal de CECOED, para relevar en el lugar.

Los vecinos del apartamento permanecieron desalojados por alrededor de una hora. Y luego fueron habilitados por las autoridades para regresar a sus hogares.

El accidente ocurrido en la madrugada de ayer en Pocitos recordó la explosión que se dio meses atrás en un edificio cercano en el barrio de Villa Biarritz.

En el mes julio, sobre las 9:00 horas de la mañana se registró un gran estallido en un edificio ubicado sobre las calles Leyenda Patria e Hidalgos, que derivó en varios pisos destrozados y que causó la muerte días después de dos personas.

Por aquel entonces tres personas fueron derivadas al Hospital Británico, dos de ellas en estado comprometido y otras cinco personas resultaron heridas de gravedad.

Con el paso de las horas se constató la muerte de dos personas: un hombre de 88 años y su mujer de 79, quien falleció días después mientras se encontraba internada en el Centro Nacional de Quemados (Cenaque).

El incidente provocó una larga e intensa investigación, con el objetivo de determinar cuáles fueron las causas que provocaron la explosión que sorprendió a todo el país. En aquel entonces la primera hipótesis que se señaló fue la explosión de una caldera de gas que tenía el edificio. Además, se debió asegurar la estabilidad edilicia.

Las consecuencias calaron hondo en la vida de los protagonistas quienes manifestaron tiempo después continuar sintiendo miedo, porque el hecho pudiera volver a repetirse una vez retornaron a sus hogares.