Redacción El País
Varias dotaciones de la Policía y los Bomberos trabajaron en la mañana de este miércoles en San Antonio, localidad de Canelones, intentando desenterrar el cuerpo de un hombre de 70 años asesinado por un policía, que confesó el crimen.

Según informó la Jefatura de Policía de Canelones, se trabajó en el fondo de la casa del asesino, donde fue encontrada una parte del cuerpo.

Víctor Trezza, jefe de Policía de Canelones, contó el procedimiento en una rueda de prensa y dijo que anteriormente se buscaba en el vertedero de residuos de Cañada Grande, ya que el criminal aseguró que había arrojado el cadáver allí.

De hecho, en principio la casa del policía prácticamente había sido descartada como lugar del entierro porque se había trabajado allí con luminol, una sustancia que permite descubrir manchas de sangre, y el resultado había sido negativo.

Pero el departamento de Homicidios, de acuerdo a algunas averiguaciones, sugirió trabajar allí y finalmente "en el pie de un árbol de roble se encontró una losa seminueva, y luego de levantarla se encontró tierra removida y a posterior una bolsa con restos humanos".

Entonces, contó Trezza según consignó Telemundo, llegó la Policía Científica, que documentó el hallazgo y aseguró que se trata de una pelvis.

Esto motivará una "reinterrogación de este policía para que ajuste la versión que dio sobre los hechos" y así encontrar el resto del cadáver.

Ahora se seguirá buscando en el vertedero, pero Trezza explicó que por el día de los funcionarios municipales, que se conmemora este miércoles, la búsqueda "no fue tan exhaustiva" en esta jornada.

Trezza explicó, además, que el funcionario imputado "mantenía una actitud correcta" en la fuerza y que de hecho "había denunciado a compañeros por acciones fuera de la ley". Contó, por ejemplo, que esa denuncia terminó con un compañero de él formalizado por un caso de abigeato.

Ese accionar, explicó el jefe de Policía, provocaba que no se hubiese levantado "ninguna alerta" de que se trataba del criminal.

La víctima fue registrada como ausente desde el 7 de abril. El funcionario policial, de 31 años y con más de 11 de servicio, fue formalizado por la fiscal Luján Gómez como presunto autor de homicidio especialmente agravado. Deberá cumplir 180 días de prisión preventiva, a la espera del juicio.

"Se continúa trabajando en procura de encontrar el cuerpo de la persona", había dicho Trezza en su momento, tras la formalización.

Aquel domingo 7 de abril, familiares de Carlos Cuadro realizaron una denuncia sobre su desaparición, luego de que un panadero, quien acostumbraba a llevarle pan hasta la casa, descubriera su ausencia. Ocurrió cuando un día llegó y se encontró con que el hombre no había retirado la bolsa que le había dejado días atrás.

Al hacer un seguimiento de los movimientos bancarios del desaparecido, se encontraron con transacciones recientes.

La Policía, en conjunto con la Fiscalía de Canelones, observó filmaciones de cámaras de seguridad que permitieron identificar al funcionario retirando más de $ 31.000 con documentación del hombre buscado.

Luego de conseguir la orden de un juez, llegaron hasta el policía y lo detuvieron. Al ser interrogado, confesó haber ultimado al hombre ausente.