Desde hace más de una semana trascendió que la fiscal de Estupefacientes de 1er Turno, Mónica Ferrero investiga la vinculación entre el hallazgo de los 265 kilos de cocaína y el narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, prófugo de la Justicia internacional desde que logró huir de Dubái con un pasaporte uruguayo.
Esta posible conexión es indagada también por el Ministerio del Interior y, de acuerdo a lo que indicó el titular de la cartera, Luis Alberto Heber, ayer en rueda de prensa “notoriamente hay indicios de que había conexiones”.
La operación “Los Titanes” había sido valorada días atrás por el subsecretario de Interior, Guillermo Maciel, como “un importantísimo golpe al narcotráfico”
La vinculación de Marset con la sustancia parte del empaquetado que presentaba la cocaína. En su envoltorio figuraba la frase “King of the south” (Rey del sur), como se hace denominar el grupo de Marset.
La organización desbaratada estaba integrada por ciudadanos uruguayos y colombianos, y se encargaba principalmente de pasar la cocaína por la frontera, ingresarla a Uruguay, acopiarla y prepararla para enviar a Europa.
Se estima que en ese continente esa cantidad tiene un valor de más de US$ 10 millones.
La investigación demandó tres meses de trabajo a los investigadores de la Dgrtid. Se realizaron 11 allanamientos en Montevideo, Canelones y Ri-vera. Fueron detenidos siete uruguayos y cuatro colom- bianos.
Entre ellos se encuentra un empresario uruguayo vinculado al transporte de camiones, con un “gran poder adquisitivo” que reside en La Tahona. En 2012 este sujeto ya había sido detenido y condenado por la incautación de 323 kilos de cocaína.
Otro de los uruguayos detenidos estaba requerido por la Justicia desde febrero del 2022 por estar vinculado a una organización criminal que generó la operación “Pegaso”, en la que se incautaron 1.361 kilos de cocaína.
Esta investigación, además, provocó fuertes enfrentamientos en la cárcel de Mujeres donde era buscada una presunta reclusa relacionada con la banda narcotraficante.