RED INTERNACIONAL DE TRATA
Ocho delincuentes y más de 20 víctimas, hasta ahora, fue el resultado que arrojó la “Operación Don Quijote”, procedimiento que logró desarticular una red de trata de personas y explotación sexual.
La banda operaba siempre de la misma forma. Se presentaban personalmente ante una mujer en situación de vulnerabilidad y luego le ofrecían “algo mejor”, una oportunidad económica en otro país. Así, sin utilizar redes sociales, fue que en Uruguay un grupo de personas comenzó a captar a posibles víctimas con el objetivo de trasladarlas a España. Una vez que resultaban engañadas, cruzaban el continente y eran explotadas sexualmente.
Ocho delincuentes y más de 20 víctimas, hasta ahora, fue el resultado que arrojó la “Operación Don Quijote”, procedimiento que logró desarticular una red de trata de personas y explotación sexual. La investigación comenzó hace aproximadamente unos tres meses ay se llevó a cabo con un trabajo conjunto entre la Dirección General de Lucha Contra el Crimen Organizado e Interpol Uruguay y España, y la Brigada Central Contra la Trata de Seres Humanos de ese país europeo.
El trabajo de coordinación entre ambas policías permitió recabar información necesaria para llevar adelante allanamientos en los dos países, rescatar a las víctimas y detener a las personas vinculadas a la red.
En Uruguay, ayer se realizaron tres allanamientos. Según indicaron fuentes de la investigación a El País, dos de ellos se hicieron en barrios periféricos de Montevideo y uno en un “barrio socioeconómico alto”. Producto de estos procedimiento se detuvo a tres personas: dos hombres y una mujer de nacionalidad uruguaya. Mientras esto sucedía en Uruguay, al mismo tiempo y de manera coordinada, en España se detuvo a otros cinco sospechosos. Se trata de tres mujeres uruguayas, un hombre también oriental y otro hombre “extranjero”, agregaron las fuentes.
La red de trata y explotación sexual funcionaba en España y las víctimas detectadas tienen entre 20 y 40 años. En Uruguay, la red consistía en captar a las víctimas, engañarlas y luego trasladarlas al país europeo para su futura explotación. Si bien los delincuentes se presentaban personalmente ante las víctimas, las fuentes consultadas indicaron que utilizaban “distintas modalidades” para captarlas. Es decir, lo hacían en diferentes lugares o ambientes.
La investigación en torno a este caso recién comienza, por lo que pueden surgir más víctimas y más detenidos. Además, tendrá causas penales en ambos países ya que hay delitos cometidos en Uruguay y en España. Los tres detenidos en Montevideo están a disposición de Sylvia Lovesio, fiscal especializada en Delitos Sexuales, Violencia Doméstica y Violencia basada en Género.
Se espera que en la jornada de hoy se realice una audiencia de formalización para imputar a los detenidos. Fuentes de la investigación dijeron a El País que “es probable” que haya víctimas en Uruguay.
La organización delictiva que captaba, engañaba y trasladaba a mujeres para ser explotadas sexualmente en España opera, según la hipótesis de los investigadores, de largo tiempo atrás. Todas las víctimas detectadas hasta el momento son de nacionalidad uruguaya.
Un trabajo coordinado entre policía uruguaya y española permitió detectar la maniobra, realizar un trabajo de inteligencia y obtener los datos necesarios para rescatar a las víctimas y también detener a los responsables de captarlas y luego explotarlas.
Ahora la investigación se centrará en detectar más víctimas y victimarios de ambos países.
Ocurría en la localidad de Alcalá de Henares
A raíz de esta investigación entre España y Uruguay, que permitió la detención de ocho personas en ambos países, Cancillería emitió un comunicado. “Entre los años 2017 y la actualidad, y de acuerdo con la información al momento existente, un total de 29 mujeres uruguayas habrían sido llevadas a la localidad de Alcalá de Henares, en las afueras de Madrid, con fines de explotación sexual. La modalidad utilizada sería la reiteración en el tiempo de traslados al país europeo para permanecer en el mismo por el tiempo permitido a los turistas”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores añadió que el Consulado de Uruguay en Madrid “tomó inmediato contacto con las autoridades locales a efectos de brindar toda colaboración posible y asistir a las víctimas”.