Redacción El País
Con la participación del secretario de la Presidencia de la República, Álvaro Delgado, y la visita de la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, quedó inaugurada la Clínica Malvín del Grupo Crea Vida, que tiene como objetivo la rehabilitación de adicciones. Se trata de la sexta clínica de Crea Vida, ubicada en Adrián Troitiño 1915, en la quinta propiedad del Sindicato de Vendedores de Diarios y Revistas, donde más de 50 personas con trastornos por consumo de sustancias recibirán una atención altamente especializada, de la mano de un equipo multidisciplinario integrado por psicólogos, psiquiatras, trabajadores sociales, profesores de educación física, educadores en talleres, entre otros.

La adicción es una enfermedad que no distingue de edad, sexo, raza, profesión, clase social ni nivel formativo. Tanto Delgado como Cosse manifestaron su compromiso ante el dramático impacto de las adicciones en el seno de la familia y la comunidad. También destacaron la labor que desarrolla el Grupo Crea Vida, tras recorrer las instalaciones de la Clínica Malvín en la emblemática quinta de los canillas, que cuenta con amplios y luminosas habitaciones para la fase de internación distribuidas en sus tres niveles, además de modernas instalaciones para el desarrollo de diversas actividades terapéuticas, deportivas y recreativas, junto a la calma y el sosiego que brinda el encanto de un jardín parquizado y sus árboles añejos que reciben con entusiasmo el canto de los pájaros.

Crea Vida trabaja en la desintoxicación controlada, que establece como eje de acción un estilo de vida saludable basado en valores orientados al desarrollo personal en sociedad y al restablecimiento de la autoestima personal. También se aborda la superación de comportamientos destructivos a través de la incorporación de una firme voluntad de cambio y de la recuperación de vínculos perdidos o deteriorados, fundamentalmente con los entornos familiar, laboral y social.

Este tipo de dispositivos genera oportunidades para quienes lo necesitan, pero también se inaugura un centro de esperanza, sostuvo el secretario de la Presidencia.

Francisco Flores/Archivo El Pais

Foto: Francisco Flores

Desde sus inicios desde hace 18 años, Crea Vida se presenta como un centro psicomédico referente para personas con adicción a sustancias psicoactivas como marihuana, cocaína, pasta base, alcohol, alucinógenos y psicofármacos. También trata la ludopatía, la adicción a los juegos de azar. Es una institución reconocida por su modelo terapéutico y un control personalizado posterior al alta que permiten la rehabilitación primero y después la reinserción en la familia, el ámbito laboral y la comunidad.

Grupo Crea Vida ofrece servicios particulares a personas de todo el país tanto de internación como de psicoterapia y proceso ambulatorios de recuperación.

“Conocemos profundamente el drama que vive la familia que ve a un ser querido sumergido en las adicciones. Conocemos el dolor, la desesperación y la impotencia que se siente. De modo que ofrecemos una solución de recuperación basada en un modo avanzado de tratamiento”, afirmó a El País Martín Puentes Menéndez, durante la inauguración de la Clínica Malvín.

Para los pacientes residentes, las amplias instalaciones de la quinta de los canillas permiten combinar las variantes de los tratamientos psicomédicos con diversas actividades recreativas y deportivas en un entorno natural.

En la modalidad ambulatoria, las personas también pueden recibir un tratamiento integral con distintos servicios clínicos y de instancias de rehabilitación, con un estricto seguimiento de la evolución de cada caso, indicó el director técnico de Grupo Crea Vida.

En total, se atienden actualmente unos 80 pacientes en las seis clínicas de Grupo Crea Vida en Montevideo. En el caso de la Clínica Malvín, hay un cupo de atención para 55 personas con posibilidad de ampliar esa cantidad de plazas.

El programa de Crea Vida “es el más recomendado para personas que se encuentren en fase avanzada de dependencia a drogas y/o alcohol y que se ven imposibilitados de cortar con el consumo”, dijo Puentes Menéndez.

Expresó también que la organización no trabaja bajo una metodología coercitiva, sino que su tratamiento tiene como común denominador un enfoque psicoeducativo y de atención personalizada, con vinculación de la familia en el proceso de rehabilitación y el contexto social más próximo del paciente.

“Este proceder integral y personalizado a cada caso nos permite lograr una mayor eficacia en los resultados del tratamiento, visualizando los primeros síntomas de recuperación a partir de los 30 días cuando el paciente recién está desintoxicado. Cada paciente tiene tiempos de internación diferentes para luego encarar la rehabilitación donde inciden los factores desencadenantes de una adicción y su vinculación con el consumo de sustancias”, indicó el director técnico de Grupo Crea Vida.

El paciente también cumple un rol importante en el proceso de rehabilitación. En primer lugar, debe dejar de consumir la sustancia problemática que sea. Ese es el primer paso. Pero después hay muchos más. Porque estar en tratamiento para una persona adicta implica un montón de cosas positivas que llevan a una vida saludable.

“El paciente se debe comprometer y hacer un esfuerzo por dejar totalmente la adicción, cumpliendo determinadas tareas a efectos de cambiar sus hábitos que lo llevaron a un consumo problemático de sustancias para comenzar a ver la vida desde otro lugar”, señaló el especialista.

Francisco Flores/Archivo El Pais

Por su parte, el secretario de la Presidencia en su discurso durante la inauguración, expresó que una vez que tomó conocimiento de la inauguración de la Clínica Malvín de Crea Vida, con el apoyo del Sindicato de Vendedores de Diarios y Revistas, asumió el compromiso de participar como señal desde el Poder Ejecutivo sobre el rumbo a seguir en esta problemática, uniendo esfuerzos y cooperación entre sector público y privado.

“Carolina Cosse estuvo más temprano conociendo la labor de Crea Vida y recorriendo las instalaciones de la clínica. Y está bueno que ahora venga el gobierno nacional a inaugurar este centro, porque son las cosas que nos deben juntar y unir para llevar adelante una política nacional de Estado independientemente de quien gobierne”, afirmó Delgado.

Tanto la salud mental como las adicciones son dos temas prioritarios para el actual gobierno. En ese sentido, Delgado recordó que en esta Rendición de Cuentas se aprobaron fondos por más de 20 millones de dólares para “dar un empuje bien grande” a lo que tiene que ver con la prevención y el tratamiento del consumo problemático de sustancias.

Destacó que es preciso realizar una atención integral multidisciplinaria de esta problemática en términos médicos, pero otra debe estar dirigida a sensibilizar al paciente. “Hay que curar las adicciones y también el alma”, dijo Delgado.

El consumo problemático y sus vulnerabilidades responden a situaciones multicausales, por lo que cooperar para que cada persona pueda salir adelante es fundamental.

El jerarca destacó el tratamiento de las adicciones a cargo de un equipo multidiscilpinario de profesionales en la Clínica Malvín, para “despertar sensibilidades y habilidades”, desde la expresión plástica, la práctica de deportes y las actividades realizadas en una huerta orgánica.

“El Estado, a lo largo del tiempo, lamentablemente ha mirado hacia el costado en estas cuestiones. Recuerdo una visita al Portal Amarillo, de los pocos lugares disponibles que tenía el Estado en Montevideo para las internaciones de personas con trastornos vinculados al consumo problemático de sustancias y entonces tenía menos cupos que hoy cuenta la Clínica Malvín (de Crea Vida). El Estado entonces no le estaba dando la dimensión que este tema tiene. Y hoy es otra la realidad en los centros públicos y privados, que tienen acuerdo con mutualistas y también está la posibilidad de la internación dispuesta por particulares”, sostuvo Delgado para luego asegurar que el gobierno “en este tema se va a involucrar con mucho más fuerza”.

El secretario de la Presidencia además señaló la profunda vocación de servicio en la actuación profesional de los equipos para tratar los problemas de adicción. El personal multidisciplinario “le pone cariño, amor, afecto y dedicación” para llevar adelante la rehabilitación, concluyó.