INTERNA BLANCA
Sus aspiraciones despertaron resistencias; Lacalle Pou bajó los ánimos.
El punto de inflexión fue una entrevista radial, dice Darío Pérez. Tras las elecciones de 2019, el exlegislador frenteamplista se había sumido en un “duelo por la pérdida de su banca en Diputados, que había mantenido durante 25 años, y por el alejamiento definitivo de la política tras varias desavenencias con su partido. Jubilado como médico, el dirigente de San Carlos se había refugiado en su chacra sobre la Ruta 9 hasta que cedió a los reiterados pedidos de quienes buscaban su voz, hasta entonces conocida, sobre todo, como la del “diputado rebelde” del Frente Amplio (FA).
Delante del micrófono por primera vez en meses, Pérez recuerda que sintió cómo se reactivaba la adormecida pasión por la actividad pública. “De alguna manera me di cuenta de que había estado en un claustro bajo siete llaves, conversando conmigo mismo”, dice. Con la decisión de volver ya tomada, el desafío era cómo ejecutarla.
Después de varios guiños a los blancos, las dudas se despejaron el lunes pasado, cuando por primera vez Darío Pérez subió las escaleras del Honorable Directorio del Partido Nacional (PN). En una reunión de la que participó Martín Lema, ministro de Desarrollo Social y potencial precandidato nacionalista a la Presidencia de la República, el exdiputado presentó la que será su agrupación departamental en Maldonado.
A corto plazo, con ella pretende recuperar su banca en la Cámara de Representantes. A largo plazo, pretende presentarse como la tercera opción en la interna nacionalista para la Intendencia de Maldonado, donde el actual jefe comunal, Enrique Antía, no podrá disputar la reelección por estar cumpliendo su segundo mandato consecutivo.
Unidad
Esta última pretensión había generado resistencias a nivel departamental -según habían reconocido dirigentes nacionalistas a El País- que se sublimaron tras la intervención del presidente Luis Lacalle Pou. En vísperas de que el proyecto de ley para reformar la seguridad social entrara al Parlamento, el mandatario reunió a los ministros, legisladores e intendentes del sector Todos para pedirles que se mostraran unidos y bajaran la ansiedad en torno a las candidaturas para 2024 y 2025, después de una sucesión de declaraciones públicas que iban en el sentido contrario. Fue un encuentro distendido que, como informó El Observador, se desarrolló el jueves pasado en la residencia presidencial de Suárez y Reyes.
El mensaje del jefe de Estado permeó y dio sus frutos, al menos en Maldonado. Consultado por El País sobre las intenciones de Pérez, el diputado y aspirante a intendente Rodrigo Blás, que participó de la reunión, señaló que aún no es tiempo de debatir estrategias electorales. “La mejor forma de proyectar las ambiciones políticas propias y del sector (Unión y Cambio) es subirme al gobierno. No hay blanco que pueda tener un resultado electoral colectivo positivo si no es transmitiendo sus acciones”, dijo, y agregó: “Las internas, las pequeñeces que tenemos todos, irán corriendo en forma paralela porque todos tenemos la intención de la mejor presentación electoral”.
El legislador señaló que vive con “alegría partidaria” y que le parece “excelente” la incorporación del exdiputado frenteamplista, más allá de si puede o no desacomodar el tablero electoral fernandino. El viernes, Unión y Cambio anunció la incorporación de María Servetto, una exdirigente de la agrupación departamental frenteamplista Cabildo 1813, que -según el sector de Blás- “brilló” en la Junta Departamental. La lista fue fundada por Darío Pérez cuando se alejó del astorismo y sirvió de precedente para la Liga Federal a nivel nacional.
En términos similares a Blás se expresó el diputado Diego Echeverría, que figura en la danza de nombres para suceder a Antía: “El PN es de porteras bien abiertas para todo el que venga a sumar. (...) Son tiempos de trabajar, de dar respuesta a la gente y quien no rinda hoy y esté cerca de la gente, el día de mañana no va a ser un buen candidato. Ya vendrán tiempos de definiciones electorales”.
Ahora, Pérez dedica todas las tardes a recorrer el departamento puerta a puerta: “Arrancamos totalmente de cero, para poder darle un perfil y no incomodar a nadie. No andamos rascando y mucho menos yendo a buscar a otros sectores. Los que vienen, vienen solos”.
La cercanía con el ministro y las proyecciones de su agrupación
La presencia de Lema en el directorio nacionalista llamó la atención. Sin embargo, Pérez aseguró que respondió al vínculo que forjaron cuando coincidieron en la cámara baja y no a potenciales alianzas electorales. “Hay sintonía humana y compartimos la preocupación por los temas sociales”, sostuvo.
Su agrupación recién se está forjando y todavía no ha abordado el asunto de las precandidaturas. De todos modos, acotó que eventualmente la decisión deberá tomarse de forma colectiva.
Las energías de Pérez están concentradas en Maldonado y, por lo tanto, en las próximas elecciones parlamentarias solo prevé competir allí con una lista encabezada por él. No obstante, el exdiputado contó que recibió consultas desde San José, Tacuarembó, Canelones y Rocha. En las recorridas se han sumado exsimpatizantes del FA, del Partido Colorado y del Partido Ecologista Radical Intransigente (PERI).
Tras escollo, Pérez definió nombre de agrupación
“La Patriada” era el nombre que Pérez había definido para su agrupación. Sin embargo, deberá cambiarlo: en setiembre ya lo había registrado oficialmente una agrupación salteña del FA, que aspira a apoyar la precandidatura del intendente de Canelones, Yamandú Orsi.
El exlegislador dijo que ya ha definido el reemplazo, pero no lo dará a conocer hasta no haberlo patentado.
El nombre apuntaba a sus raíces blancas ya que, en su juventud, Pérez militó en la corriente wilsonista. “Me han hecho sentir cómodo y valorado, que no es poca cosa”, expresó sobre su vuelta al partido fundacional.